La Policía Científica descarta el suicidio en el crimen de Los Lirios en Logroño: “Había mucha sangre y marcas de arrastre”

Europa Press

21 de octubre de 2025 12:41 h

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Este martes continúa el juicio por la mujer asesinada en el barrio de Los Lirios de Logroño en 2020. De hecho, un agente de la Policía Científica ha descartado el suicidio. “En el lugar del crimen ”había mucha sangre y marcas de arrastre. Al menos en el suceso intervino una persona más“ por lo que se descarta de nuevo el suicidio. Este agente de la científica estuvo presente en las inspecciones oculares tras recibir el aviso del presunto asesino a manos de su marido.

El juicio contra A.E.M., está acusado de un delito de asesinato con alevosía por, presuntamente, matar a su mujer al conocer que ésta se quería divorciar. El Fiscal y la Acusación Particular solicitan 22 años de cárcel mientras que la defensa del propio acusado niega todos los hechos. En su declaración como testigo ocular, ante el juez y el jurado popular, la agente ha indicado que observó partes de la casa “revueltas o desordenadas” pero, según su experiencia, “más bien parecía que se había intentado manipular alguna zona para dar la imagen de un robo”.

En el cuerpo de la mujer había restos de ADN del marido

Por su parte, y aunque el cuerpo de la víctima apareció en la entrada de la vivienda, “se observaron importantes manchas de sangre en la cama del matrimonio” y regueros de gotas de sangre en la cocina. Aunque no ha podido especificar cómo fue el orden de los hechos, sí que ha querido dejar claro que el “escenario” del crimen “era muy complejo”.

Con respecto a la víctima y el cuchillo de cocina -el arma con el que acabaron con la vida de M.M.H.- que apareció cerca de su mano izquierda, la agente de la Policía Científica ha asegurado que “daba la sensación de que se lo colocaron”.

De la inspección de la vivienda, recalca, “solo apareció ADN de la víctima” pero en el cuerpo de ella, sobre todo en las dos manos, “sí” que había muestras que correspondían al marido. A su juicio esas marcas podrían haberse producido por la necesidad de la mujer para defenderse de la agresión. Aunque tampoco aparecieron muestras de ADN de ninguna persona en el arma del crimen, la agente no descarta que “alguien” lo hubiera podido limpiar para no dejar huellas.

11 de octubre de 2020

El suceso se remonta al 11 de octubre de 2020 cuando el acusado viajó a la localidad burgalesa de Gumiel de Mercado para ayudar en las labores de vendimia a su hijo permaneciendo allí unos días, según considera el Fiscal.

Por su parte, la madrugada del 13 de octubre éste regresó a su domicilio situado en el Parque de Los Lirios en Logroño que compartía con su esposa, M.M.H, de 56 años en el momento de los hechos. Una vez accedió el acusado a dicha vivienda, comenzó una discusión con la víctima al conocer su decisión firme de poner fin a su matrimonio. Fue entonces, según el fiscal, cuando éste movido “por el sentimiento de posesión sobre la misma y con la intención de acabar con su vida, la atacó de forma sorpresiva con un arma blanca de tipo cortopunzante” en tórax y abdomen causándole la muerte.

Después, según la Fiscalía, volvió a Gumiel de Mercado donde llegó a primera hora de la mañana del 13 de octubre.