A lo largo de su extensa trayectoria artística, Picasso trabajó en diferentes estudios: en el Bateau Lavoir, en los bulevares Clichy y Raspail, La Boétie, Boisgeloup, La Californie, Mougins… En todos ellos el taller, además de espacio de creación y experimentación artísticas, se convierte también en motivo de reflexión sobre el ritual y el trabajo del artista dentro de la tradición pictórica.
El taller irrumpe como tema en la obra picassiana en los años veinte, y desde entonces no dejará de formar parte de las preocupaciones estéticas y las líneas maestras iconográficas del pintor malagueño. A veces es un espacio apenas intuido, eludido, pero con frecuencia el taller se hace presente de forma explícita y rotunda: en las escenas sobre el taller del escultor integradas en la Suite Vollard; en la posterior recreación, de modo casi obsesivo en algunos momentos, de la relación entre el artista y la modelo y, por extensión, la del artista con la pintura; o, ya en su última etapa (años sesenta), en las intensas variaciones que dedica al tema, dominadas ahora por la figura, en claro trasunto de sí mismo, de un pintor envejecido y más distanciado de sus modelos pero revestido de la misma poderosa presencia.
Los sucesivos talleres de Picasso se convirtieron, en definitiva, y como el propio artista afirmó, en “paisajes interiores”, recintos sagrados donde quedó trazada la crónica de las opciones estéticas, iconográficas y estilísticas que adoptó a lo largo de su vida.
A ese espacio íntimo y revelador, a sus implicaciones en la obra del gran genio de la pintura contemporánea está dedicada la exposición “Picasso. En el taller”, que Fundación Mapfre presenta actualmente en sus salas (hasta el 11 de mayo 2014). En evidente relación con ella, este ciclo homónimo de conferencias, que serán grabadas y retransmitidas en directo a través de la web de la Fundación Mapfre, congrega a quienes han promovido y participado directamente en la organización de la muestra y a algunos de nuestros historiadores del arte más reconocidos para abordar diversos y esenciales aspectos de los talleres picassianos y, con ellos, del arte pictórico de nuestro tiempo.