Casado ha realizado estas declaraciones durante la visita que ha realizado este miércoles a las instalaciones de la empresa Porcelanosa de Vila-real (Castellón), acompañado por la presidenta del PP de la Comunidad Valenciana, Isabel Bonig.
Al respecto, el dirigente del PP ha recordado que ya venían diciendo hace meses que “la demagogia a la hora de demonizar los motores diesel o de combustión estaba poniendo en riesgo la industria de la automoción en España”, que -ha dicho- “emplea a 500.000 personas de forma directa y a un 1.300.000 de forma indirecta, que es un 9 por ciento del empleo nacional y del PIB nacional y que representa una gran parte de la exportación nacional, que es lo ha equilibrado la balanza por cuenta corriente en los peores años de la crisis”.
Por eso, Casado ha pedido al Gobierno en funciones que “deje ya de mandar mensajes de incertidumbre al sector”, pues -ha lamentado- “llevamos meses en los que han caído las matriculaciones, las exportaciones y ahora la fabricación en la Mercedes de Vitoria, en la Renault de Valladolid, en la Opel de Zaragoza y ahora también en la Ford de Valencia”.