Los críticos del PDeCAT ven “tristes y desolados” a los exconsellers presos en Lledoners, Jordi Turull, Josep Rull y Jordi Turull, por la postura de la coordinadora general del partido, Marta Pascal, que entienden que impide resolver la pugna por la dirección de la formación.
El pulso entre familias del PDeCAT para definir la estructura directiva se ha intensificado en las últimas horas, al no haber acuerdo sobre el escalafón que debe ocupar Pascal, aunque diferentes sectores sí avalarían a David Bonvehí -actualmente coordinador organizativo- como presidente del partido y que la actual coordinadora quedara dentro de la dirección pero sin este cargo.
Pero fuentes cercanas a Pascal han expresado su rechazo a rebajar en el escalafón a la actual coordinadora general, que hoy se ha desplazado hasta la cárcel de Lledoners para reunirse con los dirigentes del partido presos, con el fin de intentar llegar a un acuerdo que resuelva la disputa por el liderazgo.
Después de Pascal, también han acudido a la prisión de Lledoners representantes del sector crítico: los consellers Miquel Buch y Damià Calvet, y la presidenta de la federación de Barcelona, Mercè Homs.
Fuentes del sector crítico, que son más afines al expresidente catalán Carles Puigdemont, han asegurado que han visto a los presos “tristes y desolados” por la postura de Pascal.
Sin embargo, las mismas fuentes esperan que se reconduzca la situación para poder llegar a un acuerdo antes de que finalice el cónclave.
Si este no fuera el caso, el alcalde de Molins de Rei (Barcelona), Joan Ramon Casals, presentaría una candidatura alternativa en contra de Pascal, lo que podría abocaría al partido a una división.