El portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, ha rechazado juzgar la petición de aministía realizada por 93 presos de ETA e Iparetarrak, aunque ha destacado que el Ejecutivo autonómico mantiene una posición “realista y pragmática” para modificar la política penitenciaria, que se plasma en sus programas 'Hitzeman' y 'Zuzenbidean'.
Erkoreka se ha referido, de esta forma, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno semanal, a la carta firmada por 93 expresos de ETA e Iparraterrak, en la que estos reclaman la amnistía para los más de 4000 miembros de la banda que siguen encarcelados.
El portavoz del Ejecutivo vasco, en respuesta a los periodistas, ha manifestado que este pronunciamiento de los reclusos de la organización terrorista supone una “excelente ocasión” para reafirmar el compromiso del Gobierno autonómico con los programas 'Hitzeman' y 'Zuzenbidean'.
Ambas propuestas forman parte de los proyectos elaborados por el gabinete de Iñigo Urkullu en materia de paz y convivencia, e incluyen medidas para la reinserción social de presos de ETA.
Erkoreka ha recordado que ambos planes están elaborados a partir de la normativa vigente en materia penitenciaria, por lo que la aplicación de las medidas que se recogen en ellos no requeriría de una cambio de legislación.
POLÍTICA “DISTINTA”
Por ese motivo, ha destacado que ésta es la “apuesta” del Gobierno vasco para avanzar hacia una política penitenciaria “distinta”, a partir de unas posiciones “realistas y pragmáticas”.
De todas formas, ha reconocido que el impulso de la reinserción de presos de ETA desde las medidas recogidas en 'Hitzeman' y 'Zuzenbidean' requeriría de “un cambio de posición del Gobierno central y un cambio de actitud por parte de los presos” de ETA y de ciertos sectores de la izquierda 'abertzale' “que no están por la labor”.