“Pasividad absoluta”, “insuficiencia”, “inadecuación”, “ineficacia”. Dureza inédita en el juicio del procés contra el dispositivo policial de los Mossos d'Esquadra el 1-O. El encargado de desmontar pieza a pieza el operativo de los Mossos ha sido el coordinador policial para impedir el referéndum, el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, que ha tildado de “estafa” el dispositivo de la policía catalana. Informa Oriol Solé y Pedro Águeda.
Pérez de los Cobos ha cumplido con precisión su cometido de testigo clave de la Fiscalía para sustentar la supuesta rebelión por la que se piden decenas de años de cárcel a los dirigentes catalanes. Ha descrito varios episodios de “alineamiento” entre policía y Govern para facilitar la votación en vez de impedirla, con mención especial al major de los Mossos, Josep Lluís Trapero, al que ha acusado de “poner palos en las ruedas en todo”. Y también ha relatado la segunda pata de la rebelión, el “alto grado de agresividad y hostilidad” en algunos colegios contra los agentes.