El primer ministro turco, Binali Yildirim, ha pedido este martes al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, colaboración contra la organización del clérigo Fethullah Gülen -a la que se ha referido como FETÖ, Organización Terrorista de Fethullah Gülen--, a la que acusa de estar detrás de la intentona golpista de 2016.
Así lo ha hecho en una rueda de prensa junto a Rajoy en la que, acto seguido, ha recordado que Turquía dio un apoyo “muy claro” a España con motivo del desafío secesionista en Cataluña, apoyando “el orden constitucional y la integridad de España”. “La integridad territorial es importante para nosotros y la apoyamos”, ha remachado.
Yildirim ha agradecido el apoyo que España dio a la democracia en Turquía tras el golpe fallido y ha asegurado que la organización de Gülen “también tiene actividades en España”, por lo que ha pedido al Gobierno español que haga un seguimiento de esas actividades. La respuesta española, según fuentes gubernamentales, es que si Turquía pide la entrega de algún presunto delincuente se estudiará caso por caso.
Todo ello después de que el Gobierno español haya concedido asilo político, por primera vez, a tres turcos que lo solicitaron precisamente a raíz de la represión tras la intentona golpista, y de que el Gobierno español rechazase, en 2017, la extradición a Turquía de dos periodistas porque tenían concedido asilo en Suecia y Alemania, respectivamente.
El primer ministro turco también ha hecho hincapié en que España y Turquía tienen una “experiencia similar” porque ambos países han “luchado durante muchos años” con “organizaciones terroristas separatistas”, “gastando mucha energía” en ello y, además, cooperando contra esas organizaciones -ETA en España y el PKK kurdo en Turquía--.
La rueda de prensa de Yildirim y Rajoy ha puesto fin a la sexta Reunión de Alto Nivel (RAN, cumbre bilateral) entre España y Turquía que se ha celebrado en el Palacio de la Moncloa. Yildirim ha sido recibido con honores militares y ha firmado en el libro de honor. Los dos jefes de Gobierno han mantenido una reunión mientras, por separado, se han celebrado encuentros de los ministros de Interior, Fomento, Economía y Medio Ambiente, Agricultura y Pesca. Después, ha habido un almuerzo a modo de reunión plenaria.
Ante los periodistas, Rajoy ha hecho hincapié en que el contenido de la cumbre ha sido fundamentalmente económico, con el objetivo principal de fomentar el fomento del comercio y las inversiones, aunque también se ha acordado reforzar la colaboración contra el terrorismo, en particular para luchar contra los combatientes extranjeros ('foreign fighters') que viajan a Irak o Siria a través de Turquía.
POSIBLE PRÓRROGA DE LOS MISILES PATRIOT
Rajoy ha dicho ver “con muy buenos ojos” la petición del Gobierno turco de que se prorrogue más allá de 2018 el despliegue de una batería de misiles Patriot en la ciudad de Adana, en el sur del país, y la resolverá “cuando proceda”. España y Turquía, ha dicho, son países aliados situados en los “límites” de la OTAN y ambos afrontan retos como el terrorismo o la presión migratoria.
Además, Yildirim ha recordado el papel de su país para frenar a los inmigrantes y refugiados que quieren ir a la UE: “Turquía protege a la UE de la inmigración, estamos contribuyendo a la seguridad europea porque, si no fuera por el esfuerzo turco, habría muchísima inmigración ilegal hacia Europa y podríamos ver más conflictos en la zona”. Rajoy ha recordado que la UE ya ha comprometido 3.000 millones de euros para los 3 millones de refugiados que están en Turquía y ha asegurado que espera poder aumentar esa contribución.
CRÍTICAS DEL CONSEJO DE EUROPA SOBRE LAS ELECCIONES
El Gobierno turco espera ver pronto una “visión renovada” de la UE de cara a las negociaciones de adhesión de Turquía, que llevan abiertas desde 2005 y ha recordado que España siempre ha sido uno de sus apoyos. Sobre este asunto, Rajoy le ha recordado “la importancia fundamental del Estado de Derecho y las garantías constitucionales”.
Eso sí, el jefe del Ejecutivo español ha evitado pronunciarse sobre las elecciones presidenciales y parlamentarias que se celebrarán en Turquía el 24 de junio, un año y medio antes de lo previsto. La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa ha aprobado este martes una dura declaración en la que avisa de que en el contexto actual es difícil que las elecciones sean “genuinamente democráticas”.
Se refiere, en concreto, al hecho de que se haya extendido por séptima vez el estado de emergencia declarado tras el golpe fallido de 2016, a la operación bélica en el sureste del país y a que se haya reformado la ley electoral apenas un mes antes de la convocatoria electoral -sin hacer reformas que consideraba necesarias, como rebajar el umbral para entrar en el Parlamento, que es del 10 por ciento, el más alto de Europa.
Rajoy ha optado por responder que el Consejo Europeo (los jefes de Estado y Gobierno de la UE), del que él forma parte y donde opina, “no ha adoptado ninguna declaración sobre este asunto”. “El Consejo de Europa y el Parlamento Europeo tienen perfecto derecho a decir lo que piensen, eso no quiere decir que estén de acuerdo con lo que yo pienso o con lo que opinen los jefes de Estado y Gobierno europeos”, ha zanjado.
Sin embargo, Yildirim ha reaccionado pidiendo al Consejo de Europa que “se dedique a sus asuntos, porque las elecciones son asunto de Turquía” y ha defendido que en todas las convocatorias el país ha dado muestras de democracia. De paso, ha acusado al Parlamento Europeo de dar voz a terroristas, advirtiendo de que eso “no sirve para la paz, ni ayuda a la lucha contra el terrorismo ni protege los valores de la UE”.
Los dos primeros ministros han hablado también sobre la situación de Siria y Rajoy ha reiterado la posición española de que solo un diálogo político conforme a ejes marcados por la ONU puede resolver el conflicto. Solo un acuerdo entre los propios sirios, ha insistido, “garantizará la integridad territorial y la unidad política” del país.
En el marco de la RAN los dos gobiernos han firmado dos acuerdos, una declaración en materia forestal y un memorando de entendimiento sobre transportes, además de organizarse una reunión empresarial. Turquía es el cuarto socio comercial para España fuera de la UE -después de China, Estados Unidos y Marruecos-- y allí trabajan 600 empresas españolas. El objetivo ahora es que las compañías, en especial las de infraestructuras, puedan aspirar a participar en los planes de desarrollo e inversión de Turquía.