El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha decidido ya disparar hacia arriba las responsabilidades sobre la trama de las mascarillas, que ha llevado al PSOE a exigir al exministro José Luis Ábalos la renuncia a su escaño del Congreso. “Esto es el Caso Ábalos por ahora, no es el Caso Koldo, es el Caso Illa, el Caso Armengol y, por tanto, el Caso Sánchez”, ha asegurado este lunes en declaraciones a los periodistas tras el minuto de silencio celebrado en Cibeles por la víctimas del incendio de Valencia.
Pese a su Ayuntamiento sufrió un caso similar en 2022 por el que están siendo investigados los comisionistas Luis Luceño y Álvaro Media Abascal, que se embolsaron comisiones millonarias por los contratos de las mascarillas que consiguieron gracias a los contactos que tenían en el Consistorio –entre ellos un primo del propio Almeida–, el alcalde cree que es el presidente del Gobierno el que debe apechugar con las responsabilidades políticas del llamado ‘caso Koldo’. Almeida se ha preguntado “¿qué es dar una solución personal a Ábalos”, “¿tratar de cerrarle la boca y que no cuente todo lo que sabe?”. “Es obvio que Koldo no era un simple asesor, era su mano derecha. Sánchez no quiere que Ábalos hable”, ha zanjado.
Por Carmen Moraga.