El ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, ve “confusas y algo erráticas” las reacciones del PP al nombramiento de Teresa Peramato como nueva fiscal general del Estado porque algunos dirigentes la han calificado en positivo mientras otras han sido “subidas de tono”. Sobre todo la de Alberto Núñez Feijóo, que dijo el lunes, antes de conocerse el nombre, que seguiría la línea “continuista” de Álvaro García Ortiz y que sería una “muestra de la degradación sanchista”, según ha recordado Bolaños.
“Este tipo de expresiones tan sumamente desaforadas por parte del Partido Popular, lo único que hacen es que se tengan que tragar las palabras que pronuncian, porque obviamente ellos mismos pierden credibilidad y ellos mismos envenenan la convivencia con este tipo de declaraciones absolutamente fuera de tono. Por supuesto que la trayectoria de Teresa Peramato como 35 años como fiscal, 35 años de trayectoria intachable, con una formación, una cualificación fuera de toda duda”, ha dicho Bolaños en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que ha designado a Peramato.
El ministro ha puntualizado que García Ortiz seguirá al frente de la Fiscalía General del Estado hasta que el nombramiento de Peramato sea efectivo, tras el informe del Consejo General del Poder Judicial y su paso por el Congreso. También ha descartado que el informe del Poder Judicial tenga que ser vinculante y ha dicho que esa nueva exigencia de Feijóo no forma parte del acuerdo sobre la judicatura que rubricaron para la renovación del CGPJ, que sí recogió algunas condiciones para los fiscales generales, como no haber ostentado puestos políticos en los cinco años anteriores a la designación. “Lo que hacemos como Gobierno es cumplir la ley y no inventarnos requisitos que no vienen en la ley”, ha dicho Bolaños.
Por Irene Castro