República Checa cerrará las tiendas y servicios como las peluquerías a partir de este jueves para tratar de controlar la pandemia, según ha anunciado el Gobierno este miércoles. La medida –que se suma al cierre ya decretado de restaurantes, cines y escuelas–, llega tras un nuevo récord de casos diarios desde el comienzo de la pandemia, 11.984 contagios más en 24 horas.
“Necesitamos proteger la salud de la gente ante todo. Si no tomamos estas medidas, el sistema de salud colapsará”, ha dicho el primer ministro Andrej Babiš. En estos momentos, República Checa, cuya curva epidemiológica está disparada, registra la mayor incidencia de Europa, con 970 casos por 100.000 habitantes en las últimas dos semanas, con datos de Johns Hopkins analizados por elDiario.es.
Según informa la prensa checa, con la excepción de las tiendas de comestibles y farmacias, todos los comercios del país deben cerrar a partir de las 6:00 a.m. del jueves. Lo mismo se aplica a las peluquerías, salones de belleza y otros lugares que ofrecen servicios similares.
El ministro de Salud checo ha dicho solo se deben realizar los trayectos necesarios, como ir al trabajo –aunque piden teletrabajo siempre que sea posible–, comprar alimentos y otros suministros. A pesar de las restricciones para viajar, recomienda salir a la calle para hacer ejercicio y tomar el aire. La gente podrá ir al campo, y a los parques, informa Reuters. Se prohibirán también las reuniones de más de dos personas fuera de los miembros de la familia y los compañeros de trabajo.
Las últimas medidas acercan al país a las restricciones de confinamiento casi total que estaban vigentes durante la primavera, según los medios checos. Durarán hasta el final del actual estado de emergencia, el 3 de noviembre.
Escribe Icíar Gutiérrez.