París, 24 ene (EFE).- El Gobierno francés podría fijar en los próximos días un tercer confinamiento a nivel nacional si los datos sobre el endurecimiento del toque de queda, aprobado la semana pasada, no muestran una mejora de la situación epidémica, informó este domingo el Ministro de Sanidad, Olivier Véran.
El semanario Le Journal du Dimanche publica además este domingo que varios altos cargos del Ejecutivo prevén que un tercer confinamiento de “al menos tres semanas” es inminente, y que el presidente, Emmanuel Macron, podría anunciarlo este mismo miércoles, tras la reunión del consejo de defensa.
“Primero quiero tener los datos sobre el efecto del toque de queda. Los tendremos la semana que viene. Si no caen, si las variantes comienzan a difundirse tomaremos medidas suplementarias, evidentemente. Y eso se llama confinamiento”, indicó Véran en el diario Le Parisien.
Véran dijo que sólo volverán a cerrar si no hay alternativa y apuntó que el confinamiento fijado a finales de octubre, menos estricto que el de marzo y con las escuelas abiertas, resultó eficaz.
“Nuestro país presenta una fuerte tensión epidémica con más entradas hospitalarias que salidas. Esto tiene desgraciadamente una sensación de ”déjà vu“. El toque de queda tiene que funcionar, tiene que servir para resistir a las nuevas variantes y para ganar tiempo”, manifestó Véran.
RESTRICCIONES DE ENTRADA AL PAÍS
Francia ha puesto en marcha nuevas medidas en las últimas semanas para frenar la expansión del virus, que estos últimos días está dejando una media de 23.000 nuevos casos diarios.
Tras el segundo confinamiento entre finales de octubre y mediados de diciembre, el Ejecutivo activó un toque de queda a partir de las ocho de la tarde que fue adelantado el pasado sábado a las seis de la tarde por un período mínimo de dos semanas.
A partir de este domingo el Gobierno ha impuesto la presentación obligatoria de un test negativo de PCR realizado en las 72 horas anteriores al viaje para la entrada al país por avión y barco de ciudadanos del espacio europeo.
Además, Exteriores indica en su página web de consejos a viajeros que a su llegada al país y tras presentación de PCR negativa, los europeos deberán aislarse durante siete días y realizar otro diagnóstico al final de este período. Sólo quedan exentos quienes lleguen por vías terrestres (carretera y tren).
El aviso insta además a los viajeros no europeos, que desde enero deben también presentar PCR a su llegada, a que permanezcan aislados una semana en un hotel establecido por las autoridades cuyos gastos correrán a cuenta del viajero.
Estas dos alertas sobre la obligación de ponerse en cuarentena, publicadas en la página de Exteriores en un aviso fechado el 22 de enero, no han sido confirmadas por voces gubernamentales. El Ministerio de Exteriores tampoco ha respondido a la petición de aclaración lanzada por EFE.
PRESIÓN HOSPITALARIA
El país notificó en el último día 23.924 nuevos casos del coronavirus y 321 muertes en hospitales, con lo que el total de fallecidos asciende a 72.877 desde marzo.
La tasa de positividad se sitúa en el 7,1 % y en los últimos siete días ha habido 10.915 admisiones en hospitales por el virus. En la actualidad, hay cerca de 26.000 pacientes hospitalizados por el coronavirus en Francia, cerca de 3.000 en ucis.
En paralelo, la campaña de vacunación avanza con más de un millón de personas vacunadas desde el 27 de diciembre.