El sofocante calor no solo afecta a España. Reino Unido también está soportando una ola de calor que se espera que termine este miércoles, pero que dejará registros nada habituales, con temperaturas por encima de los 30 grados e incluso cercanas a los 35 en algunos puntos en el sureste inglés, según el servicio de meteorología (Met, por sus siglas en inglés).
Las altas temperaturas han coincidido con el comienzo del torneo de tenis de Wimbledon, que se celebra en el suroeste de Londres, donde se suelen formar largas filas para entrar en el All England Club. Y no solo los asistentes buscan fórmulas para librarse del calor, sino que la organización tiene previstas algunas normas para que los tenistas se protejan.
La regla del calor en Wimbledon
Wimbledon, el torneo de hierba por excelencia, tiene prevista la conocida como “regla del calor”, que permite un descanso de 10 minutos cuando se superan los 30,1 grados. No solo se tiene en cuenta la temperatura, sino otros factores como la humedad, la radiación del sol o la velocidad del viento. Lo que se conoce como índice WBGT o temperatura del globo.
Esta norma es aplicable a todos los partidos, incluidos a los que ya han comenzado, de las categorías femenina y masculina. También para las mismas categorías en el caso de deportistas que compiten en la modalidad de silla de ruedas. Para que se aplique, solo será necesario que uno de los jugadores participantes pida que se ponga en marcha.
De acuerdo con el torneo, esta regla se aplicará después del segundo set en todos los partidos al mejor de tres sets. En el caso de los partidos al mejor de cinco mangas, como ocurre en el cuadro individual masculino, se pondrá en marcha tras el tercer set. Durante este descanso, los jugadores podrán abandonar la cancha durante el descanso, pero no podrán recibir entrenamiento ni atención médica.
Monitoreo de la temperatura en Wimbledon
La ola de calor que achicharra a España y a buena parte de Europa no ha pillado por sorpresa a Wimbledon, que ya había anunciado esta medida extraordinaria para la edición de 2025, en previsión de que pudiera darse un episodio así, más aún teniendo en cuenta el clima cálido hacia el que nos dirigimos como consecuencia del cambio climático.
Así, la organización se encarga de medir diariamente la sensación térmica. Para ello aplica el índice WBGT, que combina la temperatura del aire, la humedad y la temperatura de superficie, y se mide mediante un monitor de estrés térmico. Las lecturas se producen media hora antes del inicio del partido y también posteriormente, a las 14 y 17 horas, detallan.