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Antes de la película de Ariana Grande, 'Wicked' ya era un éxito: ¿cuál es el origen de esta historia?

Los fans de Wicked se preparan para Wicked: For Good, la segunda parte de la película dirigida por Jon M. Chu y protagonizada por Ariana Grande y Cynthia Erivo. El largometraje, que se grabó al mismo tiempo que la primera parte, llegará a los cines de España el próximo 21 de noviembre, y pondrá punto y final a la historia personal de Elphaba, la Malvada Bruja del Oeste. 

“Elphaba no es malvada. Ninguno de los personajes es enteramente bueno o malo. Son seres humanos y, como nosotros, ellos también se equivocan. Esta historia nos invita a entender que las etiquetas que ponemos a los demás y a nosotros mismos no son siempre correctas”, señaló Erivo al respecto de la nueva película. Ese es precisamente el trasfondo de esta historia que no comenzó en la gran pantalla, sino en las hojas de un libro.

De novela a teatro musical

Wicked es una precuela de El Mago de Oz, la película de 1939 protagonizada por Judy Garland, y cuenta la historia de Elphaba, quien acaba convertida en la Bruja Mala del Oeste. En Wicked, conocemos el pasado de la bruja: cómo fueron sus días como estudiante en la Universidad de Shiz, cómo conoció a Glinda y acabaron siendo amigas, cómo consiguió sus poderes… Pero además, desarrolla cómo las dos brujas de Oz terminaron convertidas en enemigas.

Esta historia apareció por primera vez en 1995, cuando se publicó Wicked: Memorias de una bruja mala, una novela estadounidense escrita por Gregory Maguire. El libro cuenta una historia paralela a los hechos narrados en el clásico literario El maravilloso mago de Oz, libro de L. Frank Baum publicado en el año 1900. Ya en la novela, Maguire abordó temas como la discriminación, el empoderamiento femenino o la corrupción política, presentes también en el largometraje.

Pero la fama de Wicked llegó en 2003, cuando la historia de aquel libro fue adaptada a un musical de Broadway por el compositor y letrista Stephen Schwartz y la libretista Winnie Holzman. La producción, protagonizada por Idina Menzel como Elphaba y Kristin Chenoweth como Glinda en sus primeros años, ha ganado varios premios Tony, y es uno de los que más tiempo ha estado en cartelera en la historia. 

El éxito en la gran pantalla

Que Wicked llegara a los cines era una noticia que muchos esperaban, pero las preguntas sobre si la adaptación conseguiría estar a la altura sobrevolaban. Con el estreno de la primera parte, las dudas se despejaron. Su estreno en cines fue todo un éxito: se convirtió en la película musical más taquillera de la historia tras recaudar 756,4 millones de dólares en todo el mundo, y consiguió muy buenas críticas en los medios especializados.

Ahora Wicked For Wood desarrollará en la gran pantalla la historia del segundo acto del musical de Broadway después de que Glinda y Elphaba canten Defying Gravity, una de las canciones más míticas de la producción. El director ya ha anunciado que, en esta segunda parte, el papel de Dorothy, la niña que llega a Oz después de ser arrastrada por un tornado, cobrará más protagonismo. Toda una vuelta a los orígenes.