Tres senderos rodeados de hayas y robles dentro del parque natural más extenso del País Vasco

El Parque Natural de Gorbeia se encuentra entre las provincias de Álava y Vizcaya y constituye el área protegida más extensa del País Vasco, con más de 20.000 hectáreas. El relieve de Gorbeia se caracteriza por una gran diversidad: conviven zonas de roca escarpada con laderas suaves cubiertas de pastos y extensos bosques de hayas y robles, lo que convierte este parque en un destino imprescindible si buscas opciones de senderismo este otoño.

El territorio de Gorbeia abarca municipios como Villaro, Artea, Orozco, Ceánuri y Zeberio en Vizcaya, así como Cigoitia, Zuya y Urcabustaiz en Álava. El Gobierno Vasco lo declaró oficialmente parque natural en 1994 con el objetivo de conservar sus valores ecológicos, promover un desarrollo rural sostenible y facilitar el acceso del público a su riqueza natural y cultural.

Este espacio se asienta sobre un conjunto kárstico que incluye casi 500 cavidades registradas, un aspecto que resalta su importancia geológica y su potencial para la espeleología. La cumbre del parque, el Gorbeia, alcanza los 1.482 metros de altitud y marca la frontera entre Álava y Vizcaya; en su punto más alto se encuentra la Cruz del Gorbeia.

Además de su valor paisajístico y geológico, el parque combina elementos naturales y culturales que permiten múltiples formas de exploración. Sus senderos, señalizados y equipados con paneles informativos, facilitan la observación de la fauna y la flora locales, así como el contacto con vestigios históricos y comunidades rurales que conservan tradiciones artesanales y gastronómicas. Esta variedad hace posible diseñar rutas adaptadas a distintos niveles de dificultad y tiempo disponible, garantizando una experiencia integral del parque.

Ruta corta a la cascada de Gujuli

La ruta corta comienza en Ostuño y forma un circuito de 6,5 kilómetros que se completa en aproximadamente una hora y cuarenta y cinco minutos. El sendero presenta una dificultad baja, ideal para caminantes con experiencia limitada, y atraviesa bosques de hayas y robles, así como áreas de pradera y pequeños cursos de agua que contribuyen a la riqueza del entorno natural.

El punto más destacado del recorrido es la Cascada de Gujuli, un salto vertical que supera los 100 metros de altura y que ofrece vistas panorámicas desde un mirador accesible. La ruta también bordea la laguna de Lamioxin y conduce a los núcleos de Gujuli y Oiardo, donde se puede conocer la producción local: queserías tradicionales y una fábrica de cerveza artesanal permiten visitas guiadas y degustaciones, integrando patrimonio natural y gastronomía. El trayecto retorna al punto de partida en Ostuño, completando un circuito que combina la observación de la naturaleza con la interacción cultural y económica de la zona.

Ruta media por Altzagorta - Atxulo

La ruta media parte desde el parking de Altzagorta, en Orozko, y recorre un total de 7,7 kilómetros en un circuito que puede completarse en alrededor de dos horas y media. La dificultad se considera media, con tramos de pendiente moderada y senderos estrechos que requieren atención y calzado adecuado.

El itinerario conduce a la entrada del biotopo protegido de Itzina, una cuenca natural conocida por su intrincado sistema de cuevas y formaciones rocosas. A lo largo del recorrido, los senderistas encuentran vestigios de la actividad humana pasada, como túmulos funerarios, caleros y neveras, mientras atraviesan bosques de alta montaña dominados por hayas. La ruta permite combinar la exploración geológica con la observación de la interacción histórica del ser humano con el paisaje. El camino concluye regresando a Altzagorta, completando un circuito que mezcla bosque, roca y elementos culturales.

Ruta larga por Zeberio

La ruta larga PR-BI-11 comienza y termina en Zeberio, con una extensión aproximada de 18,5 kilómetros y una duración estimada de cinco horas. Está catalogada como de dificultad alta, lo que la hace adecuada para excursionistas con experiencia y buena preparación física. El sendero es circular y combina bosques de hoja caduca, pastizales de altura y tramos con vistas panorámicas de gran amplitud.

Durante la caminata se alcanza la cima de Mandoia (637 metros), desde donde se puede observar gran parte del macizo de Gorbeia, los parques de Urkiola y Gorbeia, y los valles de Arratia e Ibaizabal. La ruta incluye el paso por tres ermitas y una iglesia: la ermita de Andra Mari, restaurada; la ermita de San Antonio, representativa de los humilladeros vizcaínos; la ermita de San Darían de Arguiñao, con una ventana que podría datar del siglo XI; y la Iglesia de Santo Tomás de Olabarrieta, un ejemplo notable de la arquitectura del siglo XVI en Bizkaia.

Si vas a visitar espacios naturales, recuerda la importancia de respetar el entorno y sigue las guías y recomendaciones oficiales para no poner en peligro el lugar ni tu integridad física.