Una jueza enmarca en la libertad de expresión la crítica a un colegio ante un supuesto acoso escolar
Un juzgado de Sevilla ha archivado la causa abierta contra el director del Instituto Andaluz contra el Acoso Escolar (IAPAE), Rafael Romero, por presuntos delitos de injurias y calumnias a través de la red social Facebook, que había denunciado la directora de un colegio público de Bormujos. El auto de sobreseimiento provisional de la causa argumenta que las expresiones manifestadas por Romero “no revisten carácter penal” y “están amparadas por la libertad de expresión y crítica”.
Además el auto, contra el que cabe recurso, señala que los límites a la crítica admisibles en el caso de funcionarios públicos (como el caso que ocupa) “son más amplios que en el caso de los meros particulares”. La Fiscalía también había pedido el archivo de la querella, recuerda el auto, que también recoge que los padres de la menor habían emprendido previamente una denuncia contra la propia directora por un presunto delito de omisión del deber de socorro, si bien el juzgado también archivó esta causa. La familia había querido denunciar públicamente el laberinto administrativo, médico y judicial que habían padecido ante un presunto caso de acoso escolar sobre su hija de seis años que el colegio no había considerado como tal y que motivó el cambio de colegio de la niña supuestamente acosada.
El director del IAPAE Romero había sido llevado a los juzgados por “una campaña de descrédito y descalificaciones” al personal docente del centro y a toda la comunidad educativa“ del CEIP El Manantial de Bormujos. ”Lo único importante para ellos es salvar su miserable reputación (...) Gente así no debe trabajar con menores de edad y mucho menos cobrar por educarlos“ fue uno de los comentarios desde la página oficial del IAPAE, el 24 de mayo del pasado año, a raíz de aquel supuesto caso de acoso escolar.
El Consejo Escolar de Bormujos, presidido por el alcalde, con quien también se reunieron en su momento los padres de la niña, emitió seis días depués un dictamen donde condenaba el comentario. Este hecho mereció una respuesta pública el 2 de junio por parte del director del IAPAE donde defendía su libertad de expresión y donde señalaba que “lo más triste de todo esto es que la noticia para todos los ilustres allí reunidos fuese mi comentario y no el sufrimiento, la ansiedad, el dolor y la salud de una niña de seis años y su familia”.
La denuncia de la directora del CEIP El Manantial recogió capturas de pantalla de estas y otras publicaciones del IAPAE relacionadas con el caso durante aquellas fechas donde se vierten “comentarios falsos, sensacionalistas y de contenido injurioso y calumnioso”. El auto de archivo de la denuncia de la familia fechado el 21 de junio (la denuncia de la directora se interpuso posteriormente, el 15 de julio), recogía que los responsables educativos se habían “indignado” porque con la trascendencia pública del caso se había “dañado gravemente la imagen del centro y la comunidad educativa”. Ahora el juzgado ha archivado esas supuestas injurias y calumnias.
