El ideario que inspira el panfleto que ha decidido pasar a dirigir Víctor Rodríguez Gago se puede definir en dos frases que él mismo escribe y firma en Libertad Digital y en la publicación que afianza el PP canario: “Esencialmente clandestino, rabiosamente panfletario y desafiantemente liberal”. Y sus objetivos, cada vez más precisos: “Impedir que las ideas equivocadas de la izquierda y el nacionalismo vuelvan a dirigir jamás los intereses de esta región. Así de claro, así de ambicioso. La idea de este panfleto liberal es que la derecha nunca más vuelva a pedir perdón por defender unas ideas que son moral, política y económicamente superiores”. Muy bueno, si no fuera por el insignificante detalle de que lo excluyente siempre ha sido enemigo de las libertades que el mismo liberal dice defender cada día. Gracias a que vivimos el tiempo que vivimos y tenemos leídas las experiencias de muchos, porque de lo contrario casi diríamos que estamos ante una reedición de Mi Lucha, de un tal Adolf Hitler, en versión resentido y sin ser ario, rubio y con ojos azules.