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El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora

El partido que hace trampas en B inaugura sede electoral

Dos cubas del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria limpian a fondo las inmediaciones de la sede electoral del Partido Popular.

Luis Bárcenas, el cabrón, lo tiene claro, y con la contundencia habitual con la que ha denunciado las finanzas opacas del PP, se lo soltó la semana pasada al juez Ruz: “El PP llevaba una caja B en todas las provincias”. Y cuando se acercaban las campañas electorales, había tortas para donar dinerito, vino a decir con mucha más solemnidad que la que nosotros somos capaces de imprimir aquí. Lo dicho el jueves por el ex tesorero del Partido Popular, desmentido nada más y nada menos por la increíble –literal, increíble- María Dolores de Cospedal cuatro días después, significaría que todas las campañas del partido en el Gobierno han sido organizadas con trampas, con dinero no declarado que le colocaba en posición ventajosa respecto a los demás competidores. Repasen, aunque sea mentalmente, esos impresionantes des pliegues de pancartas tamaño Mao Tse Tung, del gran timonel Manolo Soria adornando las calles más concurridas de la ciudad, esas vallas por todas partes, las páginas a color en la prensa impresa de papel (¡qué tiempos de gloria!), las caravanas multicolores, los conciertos y los mítines en los que el grito de guerra era “¡que no farte de ná!” Con dinero negro, dice Bárcenas que se pagaba todo eso, incluidas las sedes de campaña que el PP alquilaba para la ocasión, grandes locales a la altura de la calle, con amplios ventanales vistosamente adornados con los emblemas y los eslóganes. Más o menos como el que la mentada María Dolores de Cospedal va a inaugurar este martes en la céntrica calle de Venegas, en Las Palmas de Gran Canaria.

Una lujosa oficina en Venegas

La sede de campaña que el PP canario inaugurará este martes en la calle de Venegas es un nuevo gesto de poderío, que puede ser económico o puede ser aportación empresarial. Ocupa las dos plantas de lo que hasta diciembre del año pasado era la sede central de la histórica empresa Nogal Metal, especializada en mobiliario de oficina. Su propietario, Manuel Marrero, la vendió junto a otros inmuebles de ese edificio a la compañía Tesa Grupo Tecnológico Canario, del empresario local Francisco Ramírez, un próspero ingeniero que se adelantó a propios y extraños en el mundo de las comunicaciones convirtiéndose en un referente en la telefonía marítima, además de ser líder en otros campos tecnológicos gracias a su puntera empresa. Los datos económicos pertenecen al mundo de la confidencialidad de ambas empresas, la vendedora y la compradora, pero lo que interesa aquí es el destino provisional que se da al lujoso local de Venegas, vacío desde que Nogal Metal se trasladó a unas oficinas cercanas, en la misma acera. Porque desconocemos el dato concreto de lo que Tesa va a cobrar al PP por estos dos meses de alquiler de una oficina así, ni si lo tramitará como aportación no dineraria a la campaña, lo que habrá de quedar declarado en las cuentas oficiales. Lo que habrá que descartar, en aplicación del sentido común, es que el PP pague en dinero negro y el arrendatario admita una transacción así. Porque las lecciones están para aprenderlas.

El PP canario niega la caja B

A escala nacional ha sido María Dolores de Cospedal, como decíamos con un poco de retraso, la que ha salido a negar la existencia de una caja B del PP en cada comunidad autónoma y en cada provincia, como dijo el jueves ante el juez Ruz su ex tesorero, Luis Bárcenas. Lo desmintió con el mismo vigor con el que explicó lo de la indemnización diferida de su despido: “Por mucho que se repita una mentira, no va a ser verdad”. Salvo algunas cosas, como añadiría en gallego su presidente nacional, Mariano Rajoy. Con mucha más agilidad y hasta cierta contundencia se apresuraron a negar la existencia de caja B los dirigentes del PP canario. El primero, al menos que nos conste, fue nuestro admirado Manuel Fernández, que ha sido secretario general del partido en las Islas en las últimas convocatorias electorales, justo las que Bárcenas ha puesto en remojo. En unas declaraciones a la Ser, el profesor Cojonciano Fernández dijo una bobería tan boba que hasta él mismo debió escamarse al escucharla: “A nosotros nos auditan las cuentas la Audiencia de Cuentas y todo está en orden”. Por supuesto, don Manuel, lo malo (o lo bueno, según se mire) es que lo que audita el órgano fiscalizador son las cuentas en A, que todos los partidos presentan por imperativo legal. Porque ninguna audiencia de cuentas puede auditar, por principio, una contabilidad en B, salvo que haya cambiado la ley y haya algún gaznápiro en alguna gerencia de campaña que las entregue para pasar el examen (no estemos dando ideas, a ver). Tras Fernández, también salió en público Asier Antona a negar la existencia de dinero negro en las campañas electorales, algo que le debemos consentir a quien, en teoría, no ha coordinado ninguna. No así a su antecesor en el cargo, del que tenemos constancia por propia confesión que ha manipulado facturas para justificar dinero desviado de su fin legal. Lo hizo en el caso Bragagate, y lo explicó públicamente con tanta naturalidad que cabría pensar de él que formaba parte de su hábito cotidiano.

Soria, en vídeo

Pero bueno, el caso es que María Dolores de Cospedal va a inaugurar este martes la sede de campaña del PP en Las Palmas de Gran Canaria, y lo hará sin la presencia de José Manuel Soria, presidente regional del partido, que se encuentra acompañando al Rey Juan Carlos I en el viaje empresarial y político que tiene lugar estos días en los Emiratos Árabes. Según ha informado el partido, Soria enviará un vídeo de salutación al modo que hizo en 2012 desde Polonia amenazando con las diez plagas bíblicas a Argentina por haber nacionalizado YPF-Repsol (con perdón), con lo que espera cubrir tan delicada ausencia. Que el PP canario inaugure una sede coincidiendo con las fechas en que su líder regional se va a encontrar fuera de España tiene muchos elementos llamativos. Primero, porque mira que hay días en el calendario, incluso anteriores a la designación de Cañete, y días adaptables a un viaje oficial programado con meses de antelación. Segundo, porque a José Manuel Soria le gusta más una foto y una nube de micrófonos que a un tonto un lápiz. Y tercero, porque empiezan a tomar cuerpo los rumores que corrieron días atrás acerca de algún sonoro plante al acto por parte de destacados militantes, bastante enojados con la deriva pleitista del señor ministro y el estropicio que les está propinando aquí a los suyos con asuntos tan lacerantes como el petróleo o el recurso a la ley turística. La presencia de Cospedal y la ausencia de Soria pueden limar esas asperezas y permitir ganar un poco de tiempo para que las discusiones internas se aplacen a después del 25 de mayo. A ver si al menos tienen la suerte de que el primer canario que va en la lista, Gabriel Mato, en el puesto décimo tercero, obtiene escaño.

Los protestantes de la OMIC, a pulpiar

Se confirman nuestras noticias, adelantadas el viernes: la Oficina de Información al Consumidor (OMIC) de Las Palmas de Gran Canaria ha sido desmantelada, cerrada, inutilizada… Pongan el participio que quieran al hecho contrastado de que ese departamento ya no atiende a los ciudadanos que acuden a denunciar problemas relacionados con el consumo. Y se confirma también que el vicio de la mentira se ha extendido de manera preocupante entre algunos políticos de tres al cuarto, como es en este caso el concejal responsable del asunto, el pepero Jaime Romero, que trató de enmendarnos la plana la semana pasada alegando que el servicio se continuaba prestando con la excepción “de los expedientes sancionadores” que “han sido derivados a la Dirección General de Consumo”. Falso. En ese departamento del Gobierno hay escritos de ciudadanos en los que se afirma que han sido desviados allí con el primero de los escritos, el de denuncia, sin que haya habido por parte del Ayuntamiento la más mínima tramitación. Es lo que un funcionario de la oficina nos indicó cuando le preguntamos qué hacíamos con una denuncia que queríamos presentar contra una concreta compañía de telefonía. Y lo ha confirmado este mismo lunes el director general de Consumo, que ha mostrado su perplejidad ante el comportamiento irresponsable y muy poco leal de la administración municipal. Una vez más, el equipo de Cardona pasa de sus sufridos administrados.

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