El PP se ha impuesto nuevamente en Almería, con 131.377 votos y tres escaños, un diputado más que el pasado 20 de diciembre y 13.742 votos más. Mientras, el PSOE ha repetido con dos (84.517 sufragios, 4.917 menos que el 20D) y C's con uno (41.667 papeletas, 2.897 menos), pero Unidos Podemos no ha obtenido representación. Ese diputado que no ha sacado Unidos Podemos ha dejado a Julio Rodríguez, exjefe del Estado Mayor de Defensa (exJemad), sin escaño. Lo mismo que ya le ocurrió el 20D cuando iba de número 2 de Podemos por Zaragoza, de manera que el recambio que Pablo Iglesias buscó para Almería tras la renuncia de David Bravo -que llegó a ser diputado- por motivos personales no le ha funcionado. De hecho, el 20D Podemos e IU sumaron 50.608 votos por separado y han sacado 39.995 sufragios (10.613 menos).
La hegemonía del PP en su feudo en Andalucía por excelencia se ha reforzado, comenzando por que ha repetido su victoria en la capital. En los mayores municipios de la provincia, Roquetas de Mar y El Ejido, también ganó hace seis meses el PP con más de doble de votos que el PSOE, y esta vez ha vuelto a ocurrir, con una holgada victoria para los populares comandados por Gabriel Amat, quien tampoco ha visto que le pasen factura las denuncias en los tribunales. También han revalidado su triunfo los populares en el resto de poblaciones de más de 20.000 habitantes: Adra, Níjar y Vícar. Los tres escaños del PP serían para Rafael Hernando, Juan José Matarí y Eloísa Cabrera, mientras que por el PSOE entrarían como diputados Sonia Ferrer y Juan Jiménez Tortosa, y por C's repetiría Diego Clemente.
Cabe recordar que el 20D el PP obtuvo dos escaños con 117.635 papeletas (37,96%), por lo que ha crecido más de cinco puntos, dado que con más del 100% escrutado, controla el 43,09% de la tarta. Ese 20D el PSOE fue segundo, también con dos diputados y un 28,86% de los votos, pero esta vez se ha conformado con un 27,71%, si bien conserva los dos escaños. La participación fue del 63,71% y esta vez se ha situado en un 67,82%, por lo que es la única provincia de Andalucía junto con Granada en la que bajado la abstención.