El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 1 de Huesca ha anulado el acuerdo del pasado 15 de mayo de 2024 por el que el Ayuntamiento de Benasque aprobó definitivamente el proyecto de la telecabina que debía conectar el casco urbano con la estación de Cerler, valorado en 17 millones de euros y considerado un “símbolo” del Plan Pirineos impulsado por el Ejecutivo autonómico. El Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Benasque han anunciado que recurrirán la sentencia, continuarán con la ejecución de las obras y confían en finalizar las tres actuaciones para subsanar las deficiencias que señala la sentencia antes de que acabe el año.
Según ha adelantado El Periódico de Aragón, el fallo, firmado por el magistrado David Sampedro Ibáñez, estima el recurso interpuesto por la Asociación SOS Ribagorza y una vecina afectada, y declara nulo el proyecto por incumplir la normativa sobre dominio público hidráulico, carecer de estudio económico de viabilidad y presentar carencias en los informes geotécnicos.
El juez considera probado que la estación inferior de la telecabina, el aparcamiento anexo y parte de las infraestructuras se ubican en una zona inundable del río Ésera, lo que vulnera el artículo 9 bis del Reglamento de Dominio Público Hidráulico. En su resolución, recuerda que la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ya emitió un informe “desfavorable” sobre la modificación urbanística que permitió el proyecto al considerar que se trata de un terreno afectado por la zona de flujo preferente. “La disposición de la estación de salida con sus construcciones auxiliares y su aparcamiento anejo en zona inundable infringe el artículo 9 bis del reglamento”, concluye el fallo, al que ha tenido acceso este medio.
Además, el juez advierte de que no se ha elaborado un informe económico previo que analice la inversión ni su posible recuperación, algo que califica de “imperativo”, y considera “insuficientes” los estudios geotécnicos presentados, al haberse aprobado el trazado “sin conocimiento directo de las características geológicas y de resistencia de las zonas en las que se van a instalar las pilonas”.
Desde Sos Ribagorza consideran que es “un gran paso” y no entienden que no se contemple la vulneración del impacto ambiental. Ahora, permanecen a la espera del recurso.
Una sentencia con implicaciones ambientales y urbanísticas
El proyecto fue promovido por el Ayuntamiento de Benasque, con financiación europea de los fondos Next Generation y el apoyo del Gobierno de Aragón dentro del Plan Pirineos. La telecabina, adjudicada por 12,8 millones a la empresa Teleféricos y Nieve S.L. (filial del grupo Leitner), debía tener 1.990 metros de longitud, un desnivel del 20 % y capacidad para transportar a 2.400 personas por hora. Las obras comenzaron este verano y su puesta en marcha estaba prevista para la temporada 2026-2027. La sentencia no obliga de forma expresa a su paralización.
Respecto a la sentencia, el Gobierno de Aragón señala que el demandante alegaba doce deficiencias en el proyecto, de las cuales nueve han sido desestimadas por el juzgado en favor del Ayuntamiento y del Ejecutivo autonómico. En cuanto a las tres restantes —la inundabilidad de las instalaciones, la insuficiencia del estudio geotécnico y la ausencia de informe económico—, el Gobierno defiende que se trata de documentos y actuaciones “no exigibles en el momento de la aprobación, sino en una fase posterior”.
Sobre los supuestos incumplimientos, el Ejecutivo precisa que en el caso de la inundabilidad, “se está ejecutando el muro necesario para solventarla, y solo queda un mes de obra para concluirlo”; respecto a la insuficiencia geotécnica, recuerda que en el estudio inicial ya se preveía actuar en determinadas pilonas “en el momento de la ejecución”, y que “todas cuentan con su estudio geotécnico en el proyecto ejecutivo”; y en cuanto a la memoria económica, sostiene que “no era exigible en la fase de aprobación” y que actualmente “se está elaborando el informe de viabilidad de la explotación”.
El Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Benasque han anunciado que recurrirán la sentencia, continuarán con la ejecución de las obras y confían en finalizar estas tres actuaciones antes de que acabe el año.
La decisión judicial se suma a los frentes abiertos que ya afrontaba el proyecto tras el verano. La CHE ha incoado un expediente sancionador al Ayuntamiento de Benasque y al Instituto Aragonés del Agua por actuaciones ejecutadas sin autorización en el cauce del Ésera, donde se empleó maquinaria pesada, se eliminaron sedimentos y vegetación autóctona y se modificó la morfología del río.
En paralelo, la eurodiputada de Sumar Estrella Galán presentó varias preguntas ante la Comisión Europea alertando de un posible incumplimiento del principio de “no causar un perjuicio significativo” (DNSH), lo que podría poner en riesgo la financiación de los fondos europeos. Según SOS Ribagorza y organizaciones ecologistas como Greenpeace, las obras “causan una fuerte degradación del estado ecológico del cauce” y afectan a hábitats protegidos de la Red Natura 2000.
El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, había calificado la telecabina como un “símbolo” del desarrollo sostenible en el Pirineo, dentro de un plan de inversiones públicas en el que solo la estación de Cerler concentraba 30 millones de euros. Desde el Ayuntamiento de Benasque, el alcalde Manuel Mora ha defendido reiteradamente que el proyecto “cumple todos los condicionantes medioambientales” y que las intervenciones en el río se enmarcan en obras de “protección del casco histórico frente a futuras avenidas”.