El italiano Bennati logra al fin su triunfo de etapa
VALLADOLID, 6 (EUROPA PRESS)
El corredor Daniele Bennati, del RadioShack, se ha adjudicado al sprint la decimoctava etapa de la Vuelta a España, disputada entre Aguilar de Campoo y Valladolid sobre 204,5 kilómetros, por delante del británico Ben Swift (Sky) y del australiano Allan Davis (Orica GreenEdge).
Bennati, que había buscado la victoria en anteriores etapas, por fin pudo conseguir el objetivo de subir al podio como vencedor e imponerse al hasta ahora infalible John Degenkolb (Argos Shimano), que fue quinto en Valladolid.
En una etapa en la que el principal peligro era el viento, ante la posibilidad de que se crearan abanicos y cortes por un ritmo alto, finalmente el pelotón consiguió mantenerse compacto pese a que en la recta final de la misma se picó tiempo entre diferentes corredores al no seguir el grupo a los velocistas, lanzados a por la victoria.
De todas formas, Katusha intentó provocar algún corte en cabeza con una velocidad alta en los últimos quince kilómetros, aunque la falta de viento lateral o de cara no les fue propicia y se quedó en nada, por lo que fueron los equipos de los velocistas los que encabezaron la lucha por el triunfo final.
Para llegar a este desenlace, el pelotón tuvo que tirar abajo una fuga correosa, en la etapa en línea más larga de esta ronda con sus 204,5 kilómetros, que se formó casi al inicio de la misma y que aguantó hasta los últimos 17 kilómetros, con Gustavo César Veloso (Andalucía), Brent Bookwalter (BMC), Gatis Smukulis (Katusha), Luis Ángel Maté (Cofidis) y Martijn Keizer (Vacansoleil).
Por su parte, Alberto Contador (Saxo Bank) ha conservado el jersey rojo de líder de la clasificación general que tanto le costó ganar este miércoles sin problemas, dado que no hubo devolución de moneda alguna por parte de Joaquim 'Purito' Rodríguez.
Este viernes, la etapa transcurrirá entre Peñafiel (Valladolid) y La Lastrilla (Segovia) sobre 178,4 kilómetros, en la última oportunidad para los velocistas de conseguir una victoria en meta o, por qué no, para que llegue por fin una escapada lejana.