Llega la hora de Portillo
Javier Portillo llegó al club amarillo como fichaje estrella y portador del estandarte del proyecto para la presente temporada. El club necesitaba un reclamo para devolver la ilusión al aficionado e incentivar la campaña de abonados y este vino en forma de delantero de renombre con la cifra de 300.000 euros como coste de la inversión.
Sin embargo, según iba transcurriendo la presente campaña, el madrileño ha visto como su papel quedaba relegado a estrella en la sombra, la que proyecta el banquillo del club insular. 104 minutos de los 540 posibles figuran en su currículum como amarillo en Liga, eclipsado por la situación de indiscutible de su paisano y compañero de equipo en las filas del Real Madrid, Javi Guerrero, y por la adjudicación del puesto de revulsivo a Quiroga.
Sin embargo, ha llegado su momento, la hora de la verdad para el punta. La lesión de Guerrero deja un puesto vacante en la punta de flecha del ataque amarillo y se da el pistoletazo de salida para la lucha que mantendrá con Mauro por la titularidad.
“A mi no me gusta disfrutar de esta oportunidad por la lesión de un compañero, preferiría que Javi estuviese, ponérselo difícil y que el míster decidiese”, expresaba el madrileño, quien hacía una declaración de intenciones de pelear cada semana para coger minutos.
“Me encuentro cada día mejor”, aseguró, además de confesar que le ha costado más de la cuenta coger el tono físico debido a que no tuvo oportunidad de hacer la pretemporada.
Herminio Menéndez, representante del jugador, ofreció a los medios una serie de declaraciones polémicas sobre la situación del madrileño. En ellas precisaba que Juan Manuel “se ha equivocado si ha fichado a Javier Portillo para jugar como revulsivo durante 10 minutos”. Además, expone que el entrenador le aseguró que iba a jugar, pero le “contó una película del oeste”.
Portillo excusaba a su representante: “Él es como si fuera mi padre, por lo que sufre cuando la situación no me es favorable”, afirmó. A pesar de que deja claro que respeta sus declaraciones, dejaba claro que él no quiere entrar en este tipo de debates. “Yo lo que quiero es entrenar y jugar para hacerme un hueco”, aclaró.
“Con confianza y con minutos el gol llegará”, prometía el ex del Real Madrid, quien aún no ha conseguido inaugurar su casillero de goles con la camiseta amarilla. “Yo siempre he dicho que la Unión Deportiva ha hecho una inversión de futuro, tengo contrato para los próximos tres años”, aseguró, dejando claro que no tiene prisa por triunfar en la entidad de Pío XII.
Desde su llegada la rumorología ha señalado que el jugador no ha logrado adaptarse a la isla y que su relación con los otros componentes de la plantilla no es del todo buena. Portillo ha desmentido todas estas habladurías: “Estoy muy a gusto en la isla y en el club. Todo el personal es excelente con los jugadores. El trato del club es de primera y soy muy feliz con la plantilla que me he encontrado”, concluyó.