'Le Monde' relaciona a Eufemiano Fuentes con el Real Madrid y el Barça
El Barcelona y el Real Madrid, pero también el Valencia y el Betis, habrían recurrido a los servicios del doctor Eufemiano Fuentes, sospechoso de ser el instigador de una importante red de dopaje sanguíneo en el ciclismo, asegura este jueves el vespertino Le Monde.
Aunque oficialmente Fuentes no estaba en el equipo médico de esos clubes ni había contrato por escrito de por medio, el diario afirma que éste transmitía sus instrucciones al Barça y al Real Madrid para los tratamientos médicos a través de los doctores de esos equipos y que recibía la visita de algunos jugadores en su consulta.
Le Monde basa esas aseveraciones en “documentos confidenciales” redactados a mano por el propio Fuentes sobre los “planes de preparación” de los cuatro equipos citados para la temporada 2005-2006 a los que dice haber tenido acceso y de los cuales la Guardia Civil no tendría conocimiento.
Preguntado por Le Monde sobre sus relaciones con el Barcelona y el Real Madrid, Fuentes se negó a responder y señaló: “Me han amenazado de muerte. Me han dicho que si decía ciertas cosas mi familia y yo podríamos tener graves problemas. Me han amenazado tres veces y no me van a amenazar una cuarta vez”.
Los documentos en posesión del diario, “similares a los revelados por la policía española sobre los ciclistas, muestran por una serie de siglas y de signos identificables, que la utilización de productos dopantes era recomendada” por Fuentes.
Esos folios, elaborados para el conjunto de los jugadores de un equipo, no eran, sin embargo, nominativos“, añade Le Monde.
Precisa que el documento sobre el programa de la temporada 2005-2006 del Barça está elaborado para responder al objetivo principal del club (la Liga de Campeones, que ganó en mayo pasado) y las citas internacionales de los jugadores (la Copa del Mundo).
Unas flechas señalando hacia arriba o hacia abajo indicaban los periodos de competición intensa o de exámenes físicos, según el rotativo.
En función de esas citas y del calendario de los encuentros de la Liga española, que también ganó el Barça en la temporada anterior, hay anotados signos manuscritos correspondientes a periodos de preparación o de recuperación.
Esas inscripciones codificadas son, según el diario, las mismas que las encontradas en los planes de preparación establecidos por el doctor Fuentes para los corredores del equipo ciclista Liberty Seguros que fue incautado en el marco de la 'Operación Puerto'.
Le Monde señala que, según la investigación española, esos signos equivalen a diferentes productos dopantes.
Así, un círculo indica la administración de esteroides anabolizantes y el signo 'IG' corresponde a un precursor indetectable de la hormona del crecimiento.
En los programas de los equipos de fútbol a los que Le Monde dice haber tenido acceso aparecen además otros signos, pero de forma excepcional.
Es el caso de una 'e' en un círculo que correspondería a la extracción de sangre o a la reinyección de sangre previamente extraída a un paciente, así como de un punto dentro de un círculo que indicaría la administración de EPO.
Según el vespertino, los jugadores se beneficiaban también de un seguimiento personalizado que podía justificar una intervención médica en caso de herida o fatiga.
Documentación en Canarias
El motivo de que la Guardia Civil no haya intervenido esos documentos es que sólo registraron los apartamentos madrileños de Fuentes y no fueron hasta Canarias, donde el doctor tiene su residencia principal, según el rotativo.
En su entrevista a Le Monde, Fuentes va más lejos al afirmar que “tienen menos defensa que otros”.
“Hay deportes contra los que se puede ir y otros contra los que no, ya que disponen de una maquinaria legal muy potente para defenderse y eso podría costar también su puesto al que gobierna el deporte actualmente”, dijo el médico sin más precisiones.
Entre sus clientes, según Fuentes, no había sólo ciclistas, sino también “atletas, tenistas, futbolistas, jugadores de baloncesto y boxeadores”, pero mantienen en secreto sus identidades “en nombre del secreto médico”.
Rechazó haber cometido ningún delito contra la salud pública, como le imputa la justicia española, ya que “ninguno” de sus clientes ha tenido problemas médicos.
Para él, lo verdaderamente “peligroso” para la salud es el deporte de alta competición y calificó de “criminales” algunos calendarios deportivos o la organización de pruebas en beneficios del espectáculo.