No pudo ser. Arcadio Díaz Tejera, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Las Palmas, senador por Gran Canaria y experto corredor de fondo para lo que quiera usted mandar, anda algo desilusionado. Su deseo de convertir en un acontecimiento de primera magnitud social y política la entrega solemne de su carnet de militante socialista se quedará en casi nada. Lo tenía previsto para este viernes, día 21, víspera de la boda real, y había invitado para la ocasión a José Blanco, secretario de Organización del PSOE, y a Jerónimo Saavedra, del que quería actuase como padrino. Tanto el uno como el otro han alegado motivos de agenda, o algo así, para evitar tener que cantar el riqui-raca al modo que Arcadio lo cantó en campaña en el Centro Insular de Deportes. De celebrarse un acto así, sería el primero de la historia con tanta alharaca, lo que no ha caído muy bien en las bases y las alturas del PSC.