Nadie debió advertir de esa tan fresca relación laboral de la consejera de Turismo a la secretaria de Estado. Sí funcionaron los servicios de información para avisar al alto cargo ministerial de que no admitiera celebrar esa presentación en uno de los hoteles recientemente declarados ilegales por sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC). Lo mejor fue trasladar todos los atarecos al Cabildo, sede pública nada sospechosa (que sepamos, de momento) de estar afectado por una resolución judicial que la declare ilegal. Porque efectivamente, el Gran Hotel Meliá Volcán de Playa Blanca, en Yaiza, es uno de los afectados por esa sentencia y es propiedad de la empresa Horinsa, de la que es accionista Francisco Armas, quien a su vez es el actual presidente de Asolan, cargo que ocupaba durante el tiempo en que ls consejera canaria del ramo fue gerente.