No fue una inocentada: José Miguel Suárez Gil, presidente de la Cámara de Comercio de Las Palmas, tiene su honor y el perfecto derecho de defenderlo cuando y donde considere que le está siendo ultrajado. Como cualquier ciudadano español le protege la Constitución y el ordenamiento jurídico que nos hemos dado, y si recurre a la Justicia porque se considera insultado, ultrajado u ofendido, la Justicia tiene que atender sus demandas. Lo publicamos este domingo pero hemos decidido repetir la noticia en la edición de hoy lunes: un juez nos ha condenado por una intromisión ilegítima en el honor de José Miguel Suárez Gil a pagarle 18.000 euros de indemnización y a publicar íntegra la sentencia en este mismo periódico. Lo haríamos si la sentencia fuera firme, que no lo es, y este mismo lunes será recurrida, pero de momento acatamos con respeto el fallo judicial y, con el mismo respeto, discrepamos abiertamente de él.