Por una vez y sin desearlo en modo alguno, Juan Fernando López Aguilar fue este martes protagonista a la fuerza de la actualidad política española, que ya tiene guasa la cosa. ¡Quién se lo iba a decir hace poco más de dos años, cuando preparaba su candidatura a diputado por Las Palmas! Ahora es blanco de Blanco, y de paso, de toda la derecha, la organizada bajo siglas partidistas, y la que hace el trabajo grueso en algunas publicaciones periodísticas. Nada nuevo que contarles acerca de la situación del ministro de Justicia respecto a su posible candidatura autonómica en 2007, salvo el hecho incontestable de que todo está en manos de Zapatero. Si se confirma que se reunirán este miércoles es probable que de esa reunión salga un razonable aplazamiento hasta septiembre o una confirmación de que, ya subidos en el burro, arre burro. El de Lugo.