Este lunes ha habido algunos anuncios, no todos ellos novedosos, sobre las acciones que piensa acometer el Gobierno de España para aliviar los efectos de la crisis sobre la economía y los ciudadanos de Canarias. La batería de medidas anunciadas por los dos presidentes no son suficientes si no se ejecutan con urgencia y si, sobre todo, no vienen acompañadas por una buena gestión política y económica por parte del Gobierno de Canarias, tan dado siempre a echar la culpa de sus debilidades y deficiencias al enemigo exterior. Una vez comprobado que tal enemigo no existe sino que más bien es amigo y que se acerca con buenas intenciones, falta complementar adecuadamente las medidas, no rebajar el nivel de exigencias sobre lo ya acordado y esperar a que el Consejo de Ministros que se anuncia para octubre tenga mucho más de ejecutividad que de foto.