Lejos de informar del contenido de la auditoría ya conocida por el pleno del Cabildo de Tenerife, el periódico El Día sólo se ha dedicado a desplegar un amplio abanico de ditirambos y de escudos antimisiles que hicieran de contrapeso y de contención ante la opinión cada vez más generalizada de que Alarcó no es un buen gestor, dicho en plan fino. Así que, tras estallar el escándalo en las distintas entregas CANARIAS AHORA, don Pepito indicó a los suyos dos cosas: 1) eso no es noticia si no lo publica El Día, y 2) digamos que no es noticia, a ver si así se cumple la primera premisa. De ahí que hayan publicado varias lisonjeras piezas a mayor gloria de la inmaculada pulcritud gestora de Antonio Alarcó evitando la noticia de manera tan grotesca que al pobre lector de El Día sólo le queda preguntarse “¿a qué coño viene esto, don José?” Este sábado, sin ir más lejos, el periódico más independentista de Barrio Sésamo dedicó su editorial a cantar las excelencias profesionales y personales de Alarcó, partiendo de una afirmación de contrastado carácter científico: “Ha sentado muy mal en Tenerife el pleno que ayer celebró el Cabildo contra el PP y contra Antonio Alarcó”. Pues sí, consultada la población tinerfeña acerca de ese pleno, la respuesta abrumadora era “Sí, don Pepito, nos ha sentado muy mal ese pleno”. Pero lo mejor del editorial llegó después, cuando empezaron las alabanzas y la dramática conclusión de que, al igual que Soria, Alarcó pierde dinero en la política porque es un hombre sacrificado por los demás.