Greg Constantine pone rostro a los apátridas en 'Gente de Ninguna Parte'
MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
Este miércoles abre sus puertas en la Sala de Exposiciones de BBVA la muestra fotográfica 'Gentes de Ninguna Parte: Los Apátridas del Mundo', del estadounidense Greg Constantine. A través de 48 imágenes se pone rostro a la realidad de millones de personas víctimas de la apatridia en todo el mundo, “una de las formas más radicales e invisibles de injusticia”, según el artista.
ACNUR calcula que son en total unos 12 millones de personas en todo el mundo las que no tienen una nacionalidad reconocida ni pertenencia a ningún país. Para el responsable del Departamento de Apatridia de ACNUR, Mark Manly, ésta es una “aberración” en contra de la Declaración de Derechos Humanos de 1948, que dice que “las personas tienen derecho a la ciudadanía”.
La apatridia es un problema a nivel mundial provocado por distintos motivos, entre ellos el conflicto de leyes de nacionalidad entre países y el fracaso a la hora de registrar a todos los residentes como ciudadanos cuando un Estado se independiza. Para ACNUR, las leyes y políticas de nacionalidad excluyentes han tenido un impacto desproporcionado en las minorías étnicas, lingüísticas y religiosas.
Con la exposición, fruto de un trabajo de seis años, Constantine pretender hacer una “introducción interesante” al mundo de la apatridia y las “consecuencias que tiene en las vidas de millones de personas que son invisibles para todo el mundo, no tienen voz, ni protección, ni ser amparados por las leyes”.
“Es un problema que afecta a todos los continentes y aquí mostramos la lucha por la que tienen que pasar estas personas, con la intención de que sea un arma más para presionar a los Gobiernos”, plantea Constantine. Para la respresentante de ACNUR en España, Maricela Daniel, la muestra presenta de una “manera sutil pero efectiva ese sentimiento de dolor de no pertenecer a ninguna parte”.
Desde 2005, Greg Constantine ha fotografiado a comunidades apátridas de Bangladesh, Myanmar, Nepal, Malasia, Sri Lanka, Kenia, Ucrania o Costa de Marfil. Por eso afirma que “pocas personas entienden las dificultades a las que se tienen que enfrentar los apátridas”.