La quema del Judas
La costumbre de quemar un pelele o Judas pervive en algunos pagos de nuestras Islas, como finalización de la Semana Santa, cada Domingo de Ramos. En localidades como Taganana, Moya, Teror o Arucas, se realiza con variantes, pero es básicamente la misma tradición. Descrito por el antropólogo Galván Tudela (Las Fiestas Populares Canarias 1987) consiste en confeccionar un machango, al que se pasea por las calles en burro, en una silla o en un camión, acompañado por el griterío infantil y o con coplillas como ésta recogida en Arucas: Queremos pan / queremos vino / queremos a Judas / colgado de un pino / con un letrero que diga / te colgamos por asesino.
El Peropalo de Cáceres es un claro ejemplo de correspondencia peninsular de esta tradición, que también encontramos en otras comunidades como Cuenca y Guadalajara.