La familia Ruiz-Mateos, apartada de la gestión de Cárnica Oliventina
MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Badajoz ha declarado en concurso voluntario de acreedores a la sociedad Cárnica Oliventina, propiedad de Nueva Rumasa, y ha decidido apartar a la familia Ruiz-Mateos de la gestión de esta empresa, informaron a Europa Press en fuentes próximas al procedimiento concursal.
Nueva Rumasa adquirió esta empresa, con sede en Olivenza (Badajoz), en agosto de 2010 a través de Carcesa (Apis y Fruco), también en suspensión de pagos.
Según las mismas fuentes, ya se ha acordado con la plantilla de Cárnica Oliventina un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal de seis meses de duración para 26 trabajadores.
Además, la administración concursal ha mantenido conversaciones con varios grupos interesados en la empresa, aunque no se ha presentado ninguna oferta “concreta ni seria”.
Cárnicas Oliventinas tiene una capacidad de sacrificio de más de 1,2 millones de cabezas al año de vacuno, ovino, porcino y cerdo ibérico, según informó Nueva Rumasa tras su adquisición el verano pasado.
Además de en esta empresa, la familia Ruiz-Mateos ha sido apartada de la gestión de los hoteles de Hotasa en Baleares, Grupo Dhul, Clesa, Carcesa, Hibramer y Quesería Menorquina y, en esta última, la administración concursal ha firmado la venta a directivos y trabajadores.
Sin embargo, mantiene las facultades de administración y disposición del patrimonio de las bodegas de Cádiz (Zoilo Ruiz-Mateos, Unión de Grandes Bodegas, Bodegas Valdivia de Cádiz, Bodegas Teresa Rivero y Complejo Bodeguero Bellavista) y Rioja (Marqués de Campo Nuble), así como en Cacaolat, Elgorriaga, Helados Dhul y Chocolates Trapa.