Fernández Camero: la caída del 'abogado de todos'
La revista ya desaparecida Cuadernos del Sureste sacó a la luz pública en 2003 las múltiples facetas del ahora detenido en el marco de la Operación Unión Felipe Fernández Camero (Granada, 1948), quien fuera secretario del Ayuntamiento de Yaiza desde 1976 hasta su destitución en 2004. Lo llamó El quinto poder e insertó ese artículo en una carpeta dedicada a la corrupción. Este año el Tribunal Supremo, a pesar de reconocer que la información era veraz, ha condenado a la revista a pagar 15.000 euros por atentar contra el honor del ex secretario, que logró que un Juzgado de Arrecife secuestrara la publicación.
Si algún reproche hay que hacerle a la revista es que quizá se equivocara de posición en la escala. Camero ha sido, y es, abogado defensor de casi todos los ayuntamientos de la isla y de los empresarios más poderosos en la vía administrativa y en los últimos años también en la penal. El ex secretario tuvo hasta finales de los años noventa una buena imagen, de hombre serio, recto, buen profesional y abogado competente. Después su prestigio ha ido cayendo.
Este miércoles por la mañana lo detuvo la Unidad Central Operativa (UCO) por orden del juez César Romero Pamparacuatro. Su detención está relacionada con la investigación de la operación Jable, con los contratos de Urbaser, con presuntos pagos y regalos y con otros aspectos relacionados con la gestión de la ex alcaldesa de Arrecife, María Isabel Déniz. También han sido detenidos el ex presidente del PIL Celso Betancort; Marco Aurelio Hernández (director de zona de Fomento de Construcciones y Contratas) y Francisco José Martínez (director general de Urbaser, que fue detenido este martes en Madrid). Con este último ya son cinco los directivos de Urbaser arrestados y más de cien el total de detenidos desde el inicio de la operación.
La Secretaría de Estado de Organización Territorial lo destituyó como secretario en septiembre de 2004 por una falta muy grave, ya que compatibilizó su profesión de abogado con la de secretario sin permiso previo del pleno y formaba parte de consejos de administración de empresas público-privadas, una de ellas Parque Islas Canarias, en las que ejercía como secretario de forma incompatible con su cargo.
Ese caso formaba parte de una operación urbanística impulsada por la ex alcaldesa María Isabel Déniz. Para poder abrir el Arrecife Gran Hotel se construyó un aparcamiento subterráneo que finalmente ha sido declarado ilegal por la Justicia. Hace dos años, con Enrique Pérez Parrilla como alcalde, Camero seguía representado al Ayuntamiento para pedir la inejecutabilidad de la sentencia.
Camero es el primer eslabón de una estirpe de abogados: sus dos hijos, Juana y Felipe, le acompañan en el despacho, y su yerno, Ignacio Calatayud, también lo hizo hasta hace unos años. Ahora ejerce de asesor del presidente del Cabildo, Pedro san Ginés, con quien le une una gran amistad. Tiene más familiares relacionados con la Justicia: su sobrino político Miguel Pallarés fue fiscal jefe de Arrecife hasta hace tres años.
Apartahotel Fariones
El abogado siempre ha estado cerca del poder. Su primer caso sonado fue la defensa del Ayuntamiento de Tías por el Apartahotel Fariones. Por ese caso cobró cincuenta y dos millones de pesetas de finales de los ochenta. Los ecologistas lograron sentencia de derribo pero él logró que se declarara la inejecutabilidad de esa sentencia. El Fariones pertenece a Juan Francisco Rosa, uno de sus grandes clientes y el empresario más poderoso de la Isla, imputado por cohecho en el caso de los hoteles y en Jable, algo en lo que Camero le acaba de igualar.
En treinta años, son miles los informes, dictámenes y pleitos en los que ha participado Fernández Camero, que está bien relacionado en el ámbito de la judicatura, dentro y fuera de Canarias. Una de sus características en la profesión ha sido la de abarcar las distintas partes de un proceso. Lo hace, por ejemplo, en el conocido caso de los hoteles. La tesis del denunciante, Carlos Espino, y ahora la de la Fiscalía, es que Camero fue el cerebro jurídico de una trama organizada operación para permitir la construcción de casi treinta establecimientos en Yaiza y Teguise que después han sido anulados por la Justicia.
El ex secretario era el asesor jurídico de ambos ayuntamientos, que, con partidos políticos distintos, tenían un mismo criterio: defendían la autonomía municipal para dar licencias frente al Cabildo, ocultaron la concesión de licencias y recurrieron la Moratoria. ¿Quién era el abogado de ambos? Camero. ¿Y quién era el abogado de los promotores que también recurrieron la Moratoria y se defendieron frente a los pleitos del Cabildo? Su hija. La parte pública y la privada, de nuevo unida.
Tres imputaciones
Camero ha pasado de abogado a imputado (de momento, detenido) en los dos casos más sonados de corrupción en Lanzarote en poco más de un año. En el procedimiento penal de los hoteles comenzó defendiendo al ex alcalde José Francisco Reyes, hasta que lo imputaron a él mismo.
En este caso, en el que la investigación ya ha demostrado que Reyes aumentó su patrimonio en 800.000 euros sin justificar, Camero alegaba en 2008 que había una persecución política contra su cliente, que la investigación no era pertinente porque sólo se trata de dilucidar una prevaricación urbanística y que la jueza trasladaba los motivos del denunciante y de la Policía de forma “mimética y sin motivo”.
En el caso Unión, Camero comenzó defendiendo al Jefe de la Oficina técnica de Arrecife, Rafael Arrocha, también imputado por los contratos de Urbaser y al que dejó de representar, y fue sumando a Juan Francisco Rosa, al concejal Antonio Machín y a María Isabel Déniz. Con estos dos últimos logró que la Audiencia provincial revocara la orden de prisión dictada por el juez en una decisión muy polémica.
También está imputado en el caso de La Bufona, junto a Isabel Déniz, de quien era su abogado. La Bufona es una urbanización de Arrecife que también está actualmente fuera de la ley y que se construyó parcialmente en suelo rústico. Entre las casas que tiene una parte en ese tipo de suelo está la del fiscal Pallarés. Camero firmó las segregaciones y las licencias como secretario del Ayuntamiento. Su hija defiende en los tribunales a la promotora, Brisa Inversiones, y a muchos de los que compraron las casas, teóricamente perjudicados por la empresa.
Amistad con Déniz
Con María Isabel Déniz hizo una gran amistad. Eran habituales los viajes a Madrid los viernes con sus respectivas parejas, aunque también fueron más lejos. Se habló mucho en Arrecife de un viaje a Tanzania, y el gerente de Urbaser, Jacinto Álvarez, también detenido en abril, apuntó en su libreta, intervenida por la Guardia Civil, según reveló La Provincia, que la empresa pagó un viaje a Kenia a Déniz y “al secretario”.
En febrero de este año declaró a La Provincia que para ser un poder hay que querer tenerlo y que él nunca había querido. Con poder o sin él, por encima de la gran mayoría de políticos y empresarios de la isla, es una de las detenciones más sonadas que se podían apuntar en la Isla la UCO y el juez instructor.
En el sumario de la operación que ya no es secreto, aparece nombrado en repetidas ocasiones. En una de ellas, el ex alcalde de Yaiza, Honorio García Bravo, habla con su hijo y éste le dice que es Camero quien ha redactado una moción de apoyo a la Ley de Medidas Urgentes consensuada con el consejero Domingo Berriel y que hay que hablar con Felipe “para que ponga lo que a nosotros nos interesa que ponga”. Posteriormente, en una conversación sobre el mismo asunto con el alcalde de Tinajo, García Bravo dice: “Al final Camero ha estado manejando la isla, como siempre?”.