Liberada la ciudadana alemana secuestrada en Kabul

El Gobierno de Afganistán confirmó este lunes que la ciudadana alemana secuestrada el pasado sábado en Kabul por “un grupo criminal” fue liberada durante la madrugada de este lunes en una operación policial en el oeste de la capital.

“La pasada noche, hacia la 01.00 de la madrugada (20.30 GMT del domingo), la Policía rodeó una casa en la parte oeste de Kabul y encontró a la mujer alemana”, dijo el portavoz del Ministerio afgano del Interior, Zemarai Bashari.

Durante la intervención policial fueron detenidas cuatro personas, detalló el portavoz, que insistió en que los secuestradores pertenecían a una banda criminal y no eran ni talibanes ni terroristas.

La alemana, identificada como Christina Meier, de 31 años, es responsable de la oficina en Kabul de la organización cristiana Ora International, con sede en la localidad alemana de Korbach.

Un grupo de hombres armados la secuestro el sábado a punta de pistola cuando se encontraba almorzando en un local de la ciudad.

En la operación de rescate fueron arrestados “los principales responsables del secuestro”, identificados como Gholum Hazarat, Jaweed, Massoud y Najeeb, dijo el citado portavoz en una conferencia de prensa.

Pedían un millón de dólares por la secuestrada

Según Bashari, aunque en un principio habían pedido la excarcelación de varios compañeros presos, lo que los secuestradores pretendían era cobrar un rescate de alrededor de un millón de dólares.

“El dinero era en realidad su principal demanda”, aseguró Bashari.

Este domingo, los secuestradores aparecieron con la rehén en un vídeo retransmitido por la televisión afgana Tolo TV, en el que pedían la excarcelación de sus compañeros presos y aseguraban que no eran “mala gente” ni talibanes, sino “un grupo especial”.

Los secuestros de extranjeros en la capital afgana son poco frecuentes, aunque en las últimas semanas sí se han producido varios en la zona oriental del país.

23 misioneros surcoreanos continúan en manos de los talibanes

Hace un mes, un grupo talibán secuestró a 23 misioneros surcoreanos, la mayoría mujeres, en la provincia de Ghazni, y a los pocos días ejecutó a dos de ellos después de que el Gobierno se negara a responder a su demanda de excarcelar a varios presos rebeldes.

La semana pasada, dos de las mujeres fueron liberadas tras intensas negociaciones con una delegación de Seúl, pero los otros 19 rehenes continúan aún en manos de los talibanes, que han dado por rotas las conversaciones con los representantes surcoreanos.

También en julio los insurgentes capturaron en la provincia centro-oriental de Maidan-Wardak a dos ingenieros alemanes, uno de los cuales fue asesinado, mientras que el otro continúa retenido.

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