Lula llega a La Habana para despedirse de Fidel Castro
El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, llegó este martes a La Habana para decir adiós a su amigo Fidel Castro y destacar el acercamiento que han registrado las relaciones de Brasil y Cuba durante su mandato, que concluye a finales de 2010.
Lula, que permanecerá en Cuba durante tres días y después se dirigirá a Haití, se reunirá también con el presidente cubano, Raúl Castro. En el aeropuerto de La Habana fue recibido por el ministro de Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, pero no compareció ante los medios.
La última visita de Lula a la isla como presidente “es un mensaje a su sucesor de que las relaciones con Cuba son estratégicamente importantes y de que a él le gustaría que la cooperación continúe y se profundice”, indicó un diplomático brasileño a Reuters.
Bajo la presidencia de Lula, antiguo líder sindicalista y amigo de Fidel Castro desde hace tiempo, Brasil ha sido un sólido aliado económico y político de Cuba, proporcionando dinero e infraestructura empresarial a la isla.
La petrolera estatal brasileña Petrobras ha recibido la misión de explorar la posibilidad de que existan yacimientos frente a la costa cubana, y la constructora Odebrecht dirige un gran proyecto para convertir el puerto Mariel, ubicado a unos 40 kilómetros de la capital cubana, en un moderno centro para la carga y descarga de buques.
Además, el presidente brasileño aseguró este mes que su país quiere invertir en hoteles y autopistas en Cuba. Lula firmará acuerdos para la creación de empresas conjuntas para la fabricación de cristales, muebles y productos biotecnológicos, añadió el diplomático brasileño.
La llegada de Lula (madrugada del miércoles hora española) se produjo el mismo día en el que falleció el disidente cubano Orlando Zapata Tamayo, uno de los presos de la denominada Primavera Negra de 2003.
Zapata murió en un hospital como consecuencia de una huelga de hambre iniciada a principios de diciembre, mientras estaba en la cárcel, según confirmaron organizaciones opositoras y la madre del fallecido. Una muerte que ha sido calificada como un “asesinato” del régimen comunista por el Directorio Democrático Cubano, organización opositora.
El Gobierno cubano “se negó a garantizarle sus derechos básicos”, lo que ha terminado por convertirle en una víctima del “terrorismo de estado”, según la secretaria nacional adjunta del Directorio, Janisset Rivero.
También este martes, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, anunció que viajará a Cuba el próximo viernes para reunirse con Fidel Castro.