Al menos 20 muertos por la represión siria del viernes
Al menos 20 manifestantes han muerto en Siria por disparos de las fuerzas de seguridad del régimen de Bashar al Assad tras las oraciones de este viernes, según han confirmado varios activistas y residentes. Acto seguido, se han celebrado protestas en varias localidades sirias con el eslogan de 'Sólo nos arrodillaremos ante Dios'.
Un residente de Deir al Zor, en el este del país, ha afirmado que “Al Assad quiere acabar completamente con el levantamiento antes de que la presión internacional le sobrepase”. “La gente ha salido de casi todas las grandes mezquitas de Deir al Zor, a metros de distancia de los carros de combate que ocupan las principales rotondas y plazas”, ha explicado.
Un testigo presencial ha relatado que otra mezquita se incendió después de que las fuerzas de seguridad dispararan contra el edificio. “El eco de las balas se escucha en todo el barrio. Los francotiradores se apresuran a cobijarse en los callejones”, ha declarado vía telefónica.
Agentes de la Inteligencia Militar han disparado fuego real contra los manifestantes que salían de diversas mezquitas en Deir al Zor, acabando con la vida de tres personas, según ha sostenido un médico. Un hombre de 66 años de edad se encuentra en coma después de que una bala el entrara por el cuello y le perforara un pulmón, ha añadido.
Esta misma fuente ha declarado bajo condición de anonimato que al menos 80 personas han fallecido en Deir al Zor desde el pasado domingo, cuando las fuerzas de seguridad sirias, apoyadas por carros de combate, irrumpieron en la localidad.
“La mayoría de las victimas han sido disparados por francotiradores”, ha continuado, “la gente culpa a la Inteligencia Militar de los asesinatos antes que al Ejército y creo que su división en Deir al Zor lo pasará mal una vez que los soldados se retiren”. Esta unidad es la división de la Policía secreta más temida y se encarga de asegurar la lealtad al presidente sirio entre los militares.
La cerrazón informativa impide conocer el verdadero alcance de las revueltas y de la represión. Los corresponsales extranjeros tienen prohibida la entrada desde que se iniciaron las protestas civiles contra el presidente al Assad, contagidas desde otros países árabes como Egipto y Libia, donde han intervenido las potencias occidentales.
Otras ciudades
Por otra parte, los Comités de Coordinación Local han indicado que seis personas han muerto en los suburbios de Sakba y Douma, a las afueras de Damasco, dos más fueron abatidas en Alepo y otras tantas en la provincia de Idlib, situada cerca de la frontera con Turquía, en el norte de Siria.
El Observatorio sirio de los Derechos Humanos, por su parte, ha cifrado en cuatro el número de manifestantes muertos a manos de las fuerzas de seguridad de Siria en Alepo y en uno por disparos de un francotirador en Homs, en el oeste del país.
Asimismo, varios residentes han aseverado que cuatro personas han perdido la vida en Hama, también en el oeste, cuatro días después de que el Ejército sirio completara un asedio de cuatro días a dicha localidad, que se ha convertido en símbolo de la resistencia al régimen de Al Assad. Varios residentes y activistas habían informado previamente de la muerte de dos manifestantes en Hama a manos de la Policía siria. Los dos jóvenes fueron abatidos cerca de las mezquitas de Al Tawhid y Al Sahaba, en los barrios residenciales del norte de la ciudad, lejos del centro de la misma.
En las ciudades costeras del noroeste de Latakia y Baniyas, los asistentes que han secundado las protestas han gritado 'Vete Bashar'. También se han registrado manifestaciones en Deraa, en el sur.
El régimen de Al Assad, sin embargo, únicamente ha informado a través de la agencia oficial SANA y de la televisión estatal este viernes de la muerte de dos miembros de las fuerzas de seguridad. Perecieron por disparos de “hombres armados” en el barrio de Duma, en Damasco, según una nota que no hace mención a fallecidos en otros puntos del país de los que sí han informado activistas sirios.
Las fuerzas del Gobierno han intensificado los asaltos sobre ciudades de todo el país desde el comienzo del mes sagrado del Ramadán, hace dos semanas. Más de 1.700 civiles han muerto a causa de la represión ejercida por las tropas del régimen desde que las manifestaciones arrancasen en marzo. En cambio, las autoridades sirias sostienen que 500 soldados y policías han perdido la vida en enfrentamientos violentos con “grupos de terroristas armados”.