La ONU acusa a las fuerzas kirguises de “detenciones arbitrarias”
GINEBRA, 20 (Reuters/EP)
La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, denunció este martes las “detenciones arbitrarias” efectuadas por las fuerzas de seguridad kirguises contra personas de etnia uzbeka en el sur de Kirguistán y aseguró que los detenidos han sido sometidos a malos tratos y torturas, como el arranque de uñas o las quemaduras con cigarrillos.
“Mi personal en Kirguistán ha recibido informaciones que dan a entender que las autoridades han hecho la vista gorda ante las detenciones ilegales y los malos tratos a los detenidos para extraerles confesiones forzadas”, declaró Pillay en un comunicado. “Se nos ha informado de palizas constantes o reiteradas”, añadió.
Estos hechos, advirtió, violan las leyes nacionales e internacionales y ponen en peligro la frágil recuperación de la paz. Los enfrentamientos entre kirguises y uzbekos, que comenzaron hace seis semanas, causaron alrededor de 300 muertos, sobre todo en las ciudades de Osh y Jalalabad.
La oficina de Derechos Humanos de la ONU mantiene estrechas relaciones con las autoridades en Osh, las cuales, según han asegurado ellas mismas, han recibido muy pocas denuncias por torturas y malos tratos, según el portavoz de Pillay, Rupert Colville. “No obstante, creemos que esto se debe precisamente a que las víctimas y sus familias tienen miedo a represalias”, declaró ante los periodistas.
Más de mil personas han sido detenidas en Osh y Jalalabad desde que comenzaron los disturbios, según el comunicado de Pillay. Muchos de ellos, prosiguió, son hombres jóvenes, seguramente todos ellos de la etnia uzbeka, que han sido “detenidos arbitrariamente” y sometidos a malos tratos por parte de la Policía, el Ejército o las milicias locales.