“La Palma es un escenario ideal para la instrucción en incendios forestales por su complicada orografía”
La Unidad Militar de Emergencias (UME), un cuerpo de elite del Ejército que interviene en situaciones extremas como incendios forestales y catástrofes naturales, se ha desplazado esta semana a la Isla para realizar, por primera vez en territorio palmero, un simulacro de lucha contra el fuego en masa boscosa. “La Palma es un escenario ideal para la UME, muy propio para nuestra instrucción; es un reto por esa orografía tan complicada que tiene y por la lejanía de la Península en lo referido a refuerzos, aunque nuestro deseo es que no tengamos que intervenir en un fuego real”, ha asegurado a LA PALMA AHORA el comandante Domingo Expósito, que ha participado en la operación. “Hemos constatado que la abrupta orografía insular, con condiciones de humedad y viento favorables, facilita enormemente la propagación de un incendio forestal”, ha explicado. “Una de las razones por las que hemos querido hacer el simulacro en La Palma, además del planeamiento logístico, de traer aviones de la Península, es por el reto que supone, porque nos permite tener todos los procedimientos depurados”, ha subrayado. “Es la primera vez que participamos en un simulacro en La Palma, aunque por desgracia ya ha habido intervenciones reales en la Isla en incendios forestales”, ha recordado.
El comandante Expósito reconoce que “para nosotros ha sido una gran oportunidad poder preparar en La Palma esta campaña de lucha contra incendios forestales, que se prevé importante”. Los ejercicios del simulacro se ha desarrollado en dos zonas: en el Pico de La Nieve y en El Refugio de El Pilar. “Las relaciones con el Gobierno de Canarias son excelentes y eso ha facilitado enormemente el que la intervención sea lo más favorable posible en lo relativo a los elementos a intervenir y la coordinación”, resalta.
En total, han participado unos 250 militares y unos 70 vehículos, de los cuales 209 efectivos y 55 vehículos fueron desplazados a la Isla para la conducción de las operaciones. La máxima autoridad de la UME desplazada a la Isla para supervisión del simulacro ha sido el general adjunto de la Unidad Militar de Emergencias, Manuel Barrós Vales.
El simulacro se inició el pasado domingo y ha finalizado este miércoles con el repliegue de personal y medios a la Península, Gran Canaria y Tenerife. Han intervenido tanto medios aéreos de la UME como del Mando de Canarias. Dos helicópteros del BHELMA VI y un hidroavión ‘foca’ del Grupo 43 han reforzado los efectivos del II Batallón de Intervención en Emergencias de la UME, que tiene su sede en Morón de la Frontera, en Sevilla.
El principal objetivo del simulacro ha consistido “en poner en práctica el procedimiento y tiempos de despliegue de la UME para actuar en una emergencia de consideración en una isla menor”. Por este motivo, se trataba de “una excepción en unos ejercicios que hoy por hoy se desarrollan, conjunta y paralelamente, con el resto de actores del Sistema Nacional de Protección Civil a nivel estatal y autonómico, con los que la integración y colaboración es máxima”, explica el comandante Expósito.
El teniente coronel Isaac considera el simulacro “un éxito al haber puesto en práctica los procedimientos de planeamiento y proyección de personal y medios pocas semanas antes del inicio de la campaña, así como haber profundizado en las relaciones con las autoridades competentes de La Palma”.
El comandante Expósito califica de “muy positiva” la experiencia en la Isla y detalla que “llevábamos algún tiempo trabajando en este simulacro y hace unas se semanas, nuestro teniente general, Isaac López García, el jefe del batallón que se encuentra en Morón de la Frontera, se desplazó para coordinar este ejercicio con las distintas autoridades estatales, insulares y municipales afectadas, e incluso con la dirección del Parque Nacional para que no se produjera alarma; todo han sido oportunidades”, afirma.
En cuanto a la prevención de incendios, el citado mando militar apunta que “el sentido común prima ante cualquier recomendación, pero toda labor preventiva es buena, y hay seguir las recomendaciones de las distintas instituciones en controles de fuego, respetar calendarios, si bien hay incendios forestales que surgen por razones ajenas a la intervención del hombre”. “Nuestra razón de ser es la de apoyar al ciudadano y también al medio natural a través de la lucha contra incendios forestales, pero nunca actuamos solos, somos un medio estatal y estamos siempre bajo la coordinación del gobierno autonómico”, concluye.
