Cuatro años en noventa minutos
José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy han condensado este lunes en noventa minutos cuatro años de reproches mutuos, en un debate que había despertado más expectación que un Madrid-Barça y del que nos quedará el bonobús, la niña de Rajoy y los untados de Zapatero.
El candidato del PP quiso dejar claro que el Gobierno socialista es un peligro para España y personalizó sus aspiraciones de futuro en una niña que nazca ahora en España -de los niños, nada-.
Terrorismo, economía e inmigración los puntos más calientes, hasta que Zapatero le espetó a Rajoy que no se merece gobernar el país quien llama “untados” a la gente de la cultura por apoyar a los socialistas.
En un par de ocasiones, cuando Rajoy cuestionaba las grandes cifras económicas, Zapatero se remontaba al debate entre su vicepresidente económico y el hombre de la economía del PP.
“A mi no me hable del señor Solbes y el señor Pizarro, hábleme de usted y yo”, le contestaba Rajoy y desdeñaba las buenas cifras macroeconómicas de las que alardeaba Zapatero y le llevaba machaconamente al precio del pollo, la carne, la leche, el pan...
Ambos candidatos emplearon a menudo gráficos que mostraban a las cámaras, entre los que destacaron la “montañita” azul y roja que enseñó Zapatero para representar como subía el precio de la vivienda durante la etapa de Gobierno del PP y como, a partir de la cima -las elecciones del 2004-, descendía en una pendiente pronunciada.
Rajoy sacó también varias tablas, una de ellas en fondo rojo con una raya ascendente y la palabra “PARO” en un tipo de letra adecuada para miopes.
No se interrumpieron muchas veces y cuando lo hicieron fue sin mucha convicción. Entre las más llamativas la pregunta de Rajoy a Zapatero “¿patriota, usted?” cuando el presidente del Gobierno recordaba como había defendido por patriotismo a Aznar ante Hugo Chavez.
El candidato del PP interrumpió, “¿cómo?”, cuando Zapatero le recordaba que había llamado “untados” a los artistas que apoyaron públicamente al PSOE y llegó a preguntar “¿qué es eso?” en el momento en el que el candidato socialista le acusaba de haber hecho en su momento las regularizaciones de inmigrantes “con un bonobús”.
Y es que Zapatero se refirió en casi todos los capítulos a la gestión del anterior Gobierno del PP y, muy directamente, a la participación de Mariano Rajoy en esos gobiernos. Y Rajoy se lo reprochó, aunque de alguna manera parecía ir preparado para eso, como cuando sacó su propios datos del número de becas en su etapa.
Para el teléfono de aludidos -en caso de que lo hubiera habido- quedaron, además de Solbes y Pizarro, Felipe González, José María Aznar, Alfonso Guerra, Joaquín Leguina, Dolors Nadal, Miquel Barceló, Pedro Duque, Joaquín Sabina, Joan Manuel Serrat, Bush, Merkel, Sarkozy, Hugo Chavez, Fidel Castro y... Javier Bardem.
No se quedaron en el actor ganador del Oscar las referencias cinematográficas, ya que el candidato socialista cerró el debate con la frase legendaria del periodista norteamericano Edward R. Murrow y que dio título a una película: “buenas noches y buena suerte”.