Zapatero y Rajoy apuran hasta el último minuto la preparación de su cara a cara
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP, Mariano Rajoy, ultiman con sus colaboradores más cercanos, ordenando fichas y memorizando datos, la preparación del debate televisado que les enfrentará este lunes, y que es esperado con una inusitada expectación.
Será el primero de los dos cara a cara entre ambos durante la campaña electoral y ante los que se ha pactado hasta el más mínimo detalle: orden de intervención, bloques temáticos, temperatura del estudio (21 grados), altura de las mesas, cronometraje de los tiempos a cargo de profesionales del baloncesto...
Todo listo para un enfrentamiento dialéctico moderado por el periodista Manuel Campo Vidal y que se celebrará en el recinto de Ifema, en Madrid.
Zapatero y Rajoy han dejado libres sus agendas en las horas previas, después de que este domingo protagonizaran sendos actos de campaña en la localidad sevillana de Dos Hermanas y en Burgos, respectivamente.
Ambos han consumido muchas horas preparando el debate, incluso antes de que se desbloquearan las negociaciones y mientras se vivían algunos momentos que hicieron dudar de que realmente se fuera a poner punto y final a quince años de sequía de este tipo de duelos políticos desde los protagonizados por Felipe González y José María Aznar.
Mantener la 'marca Zapatero'
El presidente del Gobierno, según fuentes socialistas, pretende mantener la marca Zapatero, con mensajes y tonos positivos, pausados y relajados, y transmitir sus propios mensajes.
Para prepararse no ha utilizado sparrings, pero sí ha recopilado fichas y ha analizado con sus asesores debates similares celebrados en Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia.
El PSOE no espera este lunes un triunfo arrollador, pero confía en la victoria y en que el cara a cara tenga un gran efecto movilizador y lleve a las urnas a indecisos y abstencionistas.
El equipo con el que ha contado Zapatero para preparar el debate ha incluido a Alfredo Pérez Rubalcaba, Jesús Caldera, José Blanco, José Andrés Torres Mora, Enrique Guerrero, José Enrique Serrano, Ignacio Varela y Carlos Hernández.
Confiar en la suerte frente a un duro rival
Rajoy, quien por aquello de la suerte lucirá la misma corbata granate que vistió durante su participación en el espacio de Televisión Española Tengo una pregunta para usted, ha seguido también la misma preparación que para ese programa: utilizando fichas que le han preparado sus asesores más cercanos.
Un grupo del que forman parte, entre otros, Ángel Acebes, Pío-García Escudero, Gabriel Elorriaga, José María Michavila, Soraya Sáenz de Santamaría, Pedro Arriola, Carlos Aragonés, Jorge Rábago y Antonio Solá.
Estos colaboradores reconocen la dificultad del duelo con Zapatero, porque consideran que éste, aunque “mal gobernante”, es “muy televisivo”, y apuestan por un cara a cara “muy de contenidos”, si bien aseguran que su líder está preparado para la posibilidad de que su oponente busque un debate “muy duro” y de “confrontación”.
Rajoy está convencido de que el debate no será decisivo para el resultado electoral salvo debacle de uno de los dos candidatos.
Tampoco ha ensayado con sparrings, según las fuentes del PP, y, al igual que Zapatero, ha analizado debates similares en Estados Unidos y Francia.
Casi dos horas de debate con cinco minutos de descanso
El debate comenzará minutos después de las 22.00 horas [hora peninsular] y se prolongará hasta las 23.45, con un descanso de cinco minutos, aunque la Academia de Televisión dará también la señal de la llegada de ambos líderes poco después de las 21.00 horas.
Un sorteo previo ha determinado que Rajoy llegará primero y hablará en primer lugar, mientras que Zapatero cerrará el debate y se sentará a la derecha del moderador. Justo al contrario que ocurrirá el 3 de marzo.
Cada uno tendrá una intervención inicial de tres minutos, y, tras ellas, hablarán sobre los bloques temáticos acordados en tandas de dos minutos.
Son cinco los bloques prefijados (economía y empleo, políticas sociales, política exterior y de seguridad, política institucional y retos del futuro), cada uno de ellos durará quince minutos y, a su vez, tendrá varios epígrafes.