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Opinión - ¿Y ahora qué? Por Marco Schwartz

Más consejerías, bajar impuestos y rechazo a la tasa turística, las políticas que se marca el nuevo Gobierno de Canarias

Fernando Clavijo, durante la toma de posesión del cargo de presidente del Gobierno de Canarias.

Iván Alejandro Hernández

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“Déjenos gobernar. No nos han dejado llegar. Nos han dado menos treinta días. Tenga un poquito de fe”, pidió Fernando Clavijo durante la sesión de investidura para la Presidencia del Gobierno de Canarias. Ante la crítica oposición que ejercieron el PSOE y Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC) desde el primer momento, el líder de Coalición Canaria (CC) demandó un margen de cien días para desarrollar sus primeras acciones junto al Partido Popular (PP), Agrupación Socialista Gomera (ASG) y Agrupación Herreña Independiente (AHI). Minutos antes de ser investido, quiso rebajar el tono frentista con el que contestó a Ángel Víctor Torres (PSOE) o Luis Campos (NC-BC) y reclamó unidad y consenso a todo el Parlamento para afrontar los “difíciles” retos que tendrá Canarias tras una legislatura con pandemia y erupción volcánica, entre otras catástrofes o circunstancias adversas.

En su discurso, Clavijo pintó una perspectiva para la XI Legislatura nada halagüeña, con una realidad que estará marcada por los “cambios constantes” de los últimos cuatro años, con crisis económicas, financieras o sociales, además de tensiones por guerras o urgencias sanitarias. Citó como principales retos el cambio climático, la crisis hídrica, el reto demográfico y la inteligencia artificial. Y auguró “tiempos difíciles” en el plano económico, con la imposición desde Bruselas y el Gobierno de España de “disciplina fiscal”. 

Para afrontar sus vaticinios, el presidente del Gobierno de Canarias, junto al vicepresidente, Manuel Domínguez (PP), ha acordado constituir un equipo con doce consejerías, dos más que en la anterior legislatura, con seis áreas para CC, cinco para el PP y una para AHI, dando a ASG cargos intermedios. Además, la estructura del Ejecutivo será transversal, es decir, los dos socios con más fuerza intercambiarán servicios, direcciones generales o empresas públicas en las distintas áreas para evitar compartimentos estancos y primar “la estabilidad” y “la lealtad institucional”, conceptos recogidos incluso en el programa de gobierno.

Y como primera acción, ha adelantado que rebajará la política fiscal: “Vamos a empezar bajando los impuestos al consumo”, dijo, a lo que añadió la bonificación al 99% del impuesto de sucesiones y donaciones y disminuir la tasa a los combustibles en las denominadas islas verdes (La Palma, La Gomera y El Hierro). Estas acciones se llevarán a cabo en un Gobierno con Hacienda y Economía en manos del PP y que son marca de la casa. Fue una promesa en campaña electoral y se plasmó en el programa de gobierno suscrito entre CC y PP el 6 de junio, cuando se dio por cerrado el pacto que deja a la primera fuerza más votada, el PSOE, en la oposición.

En concreto, el Gobierno reducirá el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) del 7 al 5% por tramos y productos de forma modulada a lo largo de la legislatura con el objetivo de “ayudar a las familias, a los emprendedores y los autónomos” ante la inflación. La oposición del PSOE y NC ha criticado la medida reiterando que al bajar la recaudación se pierden ingresos y, por ende, se abre la puerta al recorte del gasto en ámbitos como la sanidad o educación. En cambio, Clavijo, que es economista, ha sostenido que supondrá un ahorro para la ciudadanía y ha negado que conduzca a tener peores servicios públicos, alegando que lo que marca la diferencia no es disponer de más o menos presupuesto, sino una “gestión seria, eficaz y rigurosa”. Sin embargo, aún no ha detallado en qué ámbitos aplicará la reducción ni cuándo se llevará a cabo.

En otros aspectos del “cambio de rumbo” o “giro de timón” que anunció Clavijo para el Gobierno de Canarias, se incluye reforzar y dar más facilidades a la actividad turística como principal motor económico del Archipiélago. En su discurso, Clavijo alertó del peligro de que en las islas persistan los brotes de turismofobia y abogó por reforzar su valor en la sociedad como generador de empleo. Del nuevo Ejecutivo no se puede esperar que aplique la ecotasa, un impuesto que se aplicaría a los visitantes a las islas, que abanderó Podemos en la pasada legislatura y que el PSOE pospuso. En la misma línea que las patronales del sector, tanto CC como el PP se han mostrado en reiteradas ocasiones totalmente en contra de aplicar esta medida en las Islas. A lo que sí se ha comprometido la Consejería que estará en manos del PP es a encaminar la actividad para que tire de otras como el comercio o el sector primario con el objetivo de diversificar la economía para el paraguas de la sostenibilidad.

A pesar de que fue citado como uno de los grandes retos a los que se enfrenta Canarias, la mitigación o lucha contra el cambio climático apenas tuvo espacio en su discurso, al igual que en el programa elaborado con el PP. La formación liderada por Manuel Domínguez, que gestionará la Consejería de Transición Ecológica, ha abogado por derogar la Ley de Cambio Climático del Gobierno regional, una de las mayores apuestas del anterior Ejecutivo, que fue definida como la norma más ambiciosa de todo el Estado en este ámbito. Pero Clavijo ha matizado que será reformada “para mejorarla”. A diferencia de la IX Legislatura, cuando CC no se tomaba en serio el calentamiento global, esta vez sí se ha comprometido a seguir los objetivos marcados para lograr la neutralidad climática en 2050: en cuatro años se compromete a aumentar la penetración de renovables del 20 al 45%.

Para Clavijo, otro de los grandes retos a los que se enfrenta Canarias es la crisis hídrica que afectará al sector primario, al que reivindicó como una prioridad para su Ejecutivo. Para afrontar la escasez de agua, prometió nuevas desoladoras, priorizando Fuerteventura, una isla con un sistema de distribución obsoleto que tiene tuberías que han superado su vida útil hace más de diez años. También se comprometió al cierre del anillo hídrico insular de La Palma y citó otras obras que acometerá en las demás islas.

Durante la pasada legislatura resucitó el viejo debate de la sobrepoblación de las islas y se constituyó la comisión sobre el reto demográfico que se pospuso para abordar con un mayor margen si es necesario actuar en este sentido. El nuevo Ejecutivo ha recogido el guante atribuyendo a este asunto el rango de “uno de los mayores retos del futuro de las Islas”. Así, tal y como recogió el programa de CC y PP, se creará una Consejería de Reto Demográfico que desarrollará una estrategia y un plan de acción para abordar el desequilibrio de habitantes entre las islas, tanto en los municipios tendentes a la despoblación como en los que denominan “tensionados”.

La vivienda copó gran parte de los mítines de los partidos durante la campaña del 28 de mayo por la aprobación de la ley estatal el 27 de abril. Durante su tramitación, CC no solo se posicionó en contra, sino que se alineó con las tesis del PP, señalando las medidas de protección para personas vulnerables en caso de desahucio como una puerta para “legalizar la ocupación”. Coalición Canaria no llevó a cabo ningún plan de vivienda pública durante diez años, hasta que el Parlamento aprobó por unanimidad en diciembre de 2020 el Plan de Vivienda 2020-2025. Ahora, el nuevo Ejecutivo promete un Pacto por la Vivienda en Canarias para desbloquear proyectos paralizados y tomar medidas para abaratar precios de mercado; además, buscarán la colaboración con ayuntamientos para tener suelo.

Sanidad, educación y servicios sociales

Las listas de espera en Sanidad fueron una de las principales críticas que arrojaron tanto CC como el PP al Gobierno del Pacto de Las Flores: en 2022 crecieron un 12,5% y se situaron en una media de cinco meses. Es la Consejería que provocó la ruptura entre CC y PSOE en 2016 y esta vez se la queda Clavijo, aunque áreas tan importantes que gestionan un gran presupuesto como el Servicio Canario de la Salud podrían compartirse con el PP. En este ámbito propone dialogar con todos los actores del sistema para mejorar el servicio y dotar de los recursos e infraestructuras necesarias a las islas. Además, se compromete a ampliar la atención psicológica: como mínimo, lograr diez profesionales por cada 100.000 habitantes.

En educación, en manos del PP, aún no se ha especificado que se vaya a cumplir con el requisito legal (según la norma autonómica de educación) de destinar el 5% del PIB de Canarias a esta área. Sí se ha anunciado un Pacto por la Educación que recoja las demandas de todos los actores del sector y facilite la aplicación de medidas. La Formación Profesional adquiere una gran importancia para el nuevo Ejecutivo, que también aboga por aumentar la inversión en I+D+I y priorizar “la igualdad de oportunidades; la atención a la diversidad y la cultura del esfuerzo”. Es en este ámbito donde únicamente se ha hecho referencia a la igualdad, que estuvo ausente del discurso de investidura de Clavijo; en el programa se aboga por llevar a cabo medidas que incidirán en la prevención del sexismo, la discriminación y la violencia, además de favorecer la integración de las personas trans.

El mismo presidente que en 2017 se negó a implantar una renta básica porque creía que cronificaba la pobreza aboga ahora por implementar la Ley de Servicios Sociales, cuya catálogo fue aprobado hace unos meses con 1.800 millones de euros para los próximos doce años, ejecutar un Plan de Lucha contra la Pobreza y colaborar con el Tercer Sector. También puso el foco en la atención a las personas mayores, comprometiéndose a implantar 5.500 camas sociosanitarias en las Islas. La gestión del área, que vuelve a manos de CC, fue reprobada por el Parlamento cuando estaba al frente Carmen Valido (candidata al Congreso) entre 2015 y 2019. Durante la pasada legislatura, en manos de Podemos, se consiguió incorporar cuatro veces más beneficiarios al sistema que la media estatal. Ahora, Clavijo se ha comprometido a dotar de más recursos al sistema.

Relaciones Canarias-Estado

Uno de los puntos centrales del discurso de Coalición Canaria es, desde su fundación, la relación con el Estado y la larga lucha que dice mantener para lograr derechos y conquistas para las Islas. No la obvió en su intervención Clavijo y es uno de los apartados más extensos del programa suscrito con el PP. Como punto central: la defensa del Régimen Económico y Fiscal de Canarias y el desarrollo del Estatuto de Autonomía para adquirir más competencias.

“Dialogaremos hasta el límite de lo razonable, e incluso más allá, pero les aseguro, señorías, que no tememos al conflicto, y llegado el caso acudiremos a todas las instancias políticas y judiciales que estén a nuestro alcance para que se respete a esta comunidad autónoma y al pueblo canario”, anunció Clavijo.

También anunció la Ley de Volcanes y exigirá al Gobierno de España que cumpla con lo prometido con La Palma, como el mantenimiento del IRPF y los fondos para la reconstrucción y salud mental durante diez años, o que priorice la cooperación con otras autonomías en materia migratoria y tenga más sensibilidad con la atención a menores extranjeros llegados a las Islas. El Gobierno de Canarias también quiere estar presente en las reuniones bilaterales con Marruecos y, en el marco comunitario, se reforzará la participación directa del Archipiélago como Región Ultraperiférica junto a Francia y Portugal.

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