El Gobierno canario reconoce que es un contexto “realmente preocupante” la compra de vivienda por parte de extranjeros y la emergencia habitacional

El consejero de Obras Públicas, Pablo Rodríguez, ha admitido este martes que es prácticamente imposible volver a los datos de construcción de vivienda anteriores a 2008, porque no hay ni suelo ni capacidad para edificar a ese ritmo, “ni necesidad probablemente”.

Hasta la citada fecha hubo años en los que en Canarias se llegaron a edificar 30.000 viviendas, cifra correspondiente al mejor registro anual, pero en la última década el mayor número de edificaciones en un ejercicio es de 3.000, una producción “absolutamente insuficiente” para la demanda habitacional en las islas, ha dicho el consejero.

El titular de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad ha facilitado estos datos durante una comparecencia solicitada por el diputado nacionalista José Manuel Bermúdez en relación con la adquisición de viviendas por parte de extranjeros en la provincia de Santa Cruz de Tenerife desde 2012 hasta la actualidad.

Al respecto, Rodríguez ha afirmado que los datos son “extraordinariamente llamativos”, con casi un 30% de las compras por parte de extranjeros en dicha provincia frente al 20% en el resto del archipiélago.

Es un contexto “realmente preocupante” porque se suma al de la emergencia habitacional, y por ello ha recordado el consejero que los servicios jurídicos de la Comunidad Autónoma preparan un estudio para pedir a la UE que se pueda limitar la compra de vivienda por parte de extranjeros no residentes en las islas.

Este límite podría argumentarse por tres vías: la exigencia de un tiempo mínimo de estancia en el país para poder adquirir una vivienda, la exigencia de una autorización previa a la hora de comprar y medidas fiscales y tributarias.

“Hay pocas dudas de que se está desvirtuando el mercado inmobiliario de manera clara y no descartamos encontrar tanto a Europa como al Estado español como aliados ante esta circunstancia excepcional”, ha proseguido el consejero, para precisar que “lo que no vamos a hacer es mirar para otro lado y dejar de intentar una respuesta a la emergencia habitacional”.

Para el nacionalista José Manuel Bermúdez, hay una inquietud real en la sociedad canaria por este asunto “y la inacción no es una opción”, al tiempo que ha considerado que Europa tiene la obligación de responder ante esta situación y tanto la UE como el Gobierno de España “no pueden abandonar a Canarias frente a un problema demográfico y habitacional”.

Asimismo, ha señalado que al grupo Nacionalista (CC) no lo van a encontrar pidiendo una limitación de acceso por razón de color o religión sino por sostenibilidad, pues ha cuestionado si Canarias es capaz de ofrecer los servicios necesarios ante las previsiones estadísticas de que en los próximos 15 años llegarán a las islas otros 350.000 habitantes.

La socialista Patricia Hernández ha considerado que la postura del Gobierno regional es un elemento de distracción para evitar tomar medidas, y se ha preguntado qué coherencia hay en pedir a la UE que limite la compra de vivienda al mismo tiempo que se solicitan 700.000 euros de fondos Next Generation para atraer nómadas digitales.

Jennifer Curbelo, del grupo Popular, ha objetado que Canarias forma parte de la UE y por lo tanto debe respetar sus principios fundamentales de libertad de circulación de personas y de capitales, y ha pedido que no se desvíe la atención del objetivo principal, que debe ser el impulso de la vivienda pública en las islas “y hacer la tarea pendiente” en este ámbito.

La diputada de Vox Paula Jover ha cuestionado que se tilde a su grupo de xenófobo mientras que el Gobierno busca poner límites a las personas que llegan legalmente a Canarias, lo que ha calificado de oportunismo político disfrazado de sensibilidad, y ha asegurado que buscan un culpable porque son incapaces de reconocer su nefasta gestión en materia de vivienda pública.

Para la parlamentaria de Nueva Canarias-Bloque Canarista Carmen Hernández quienes reclaman la limitación en la compra de vivienda “no miran la raza ni el color de la piel”, mientras que Vox cree que si son “ricos y blancos, caben todos” y le dan la bienvenida a quien llega para “especular”.

Melodie Mendoza, de Agrupación Socialista Gomera, ha pedido cautela ante la atribución del problema de la falta de vivienda a la compra por parte de extranjeros, pues el grueso de la emergencia en este ámbito se debe al aumento de población durante años y a una escasa y mala planificación en esta materia.

Raúl Acosta, de Agrupación Herreña Independiente, ha considerado que se está “orillando” a los canarios de su mercado inmobiliario, lo que ha calificado de “genocidio” del sector, que brinda una oferta de vivienda insuficiente en la que se expulsa a quienes menos recursos tienen, normalmente los propios residentes en las islas.