IUC llama a la “rebelión democrática carnavalera”
IUC ha llamado a la ciudadanía a llevar a cabo una “rebelión democrática carnavalera” que se oponga a la privatización del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria. Para ello, insta a las organizaciones del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria “a hacer un poco de autocrítica y recordar sus orígenes, recordar su propia identidad generadora que nace de la sátira y la crítica”. “Solicitamos la vuelta al carnaval desde los barrios, no al engaño del carnaval de distrito. El Carnaval partía desde cada barrio hacia la puesta en común, no desde una centralización hacia cada distrito”, añade.
El partido afirma en un comunicado que la gestión en los últimos años de los Carnavales de Las Palmas de Gran Canaria “es una metáfora de las políticas neoliberales practicadas en el municipio y que están llevando al Carnaval a la pérdida de su esencia y a su destrucción”, a la vez que añade que tanto los gobiernos del PSOE como los del PP apostaron desde hace años por la privatización de los servicios y espectáculos del Carnaval, “política que se ha visto incrementada en los últimos años”.
“Esta nefasta orientación pasó por supeditar el ingenio, la sátira y el carácter popular de los Carnavales a los patrocinios, al dinero de las televisiones y al clientelismo de algunas asociaciones Carnavaleras. Algunos amateurs del Carnaval se convirtieron en profesionales del Carnaval, que vivían de la subvención, le reían las gracias al alcalde de turno y dejaban de ser sujetos contestones con el poder, poniéndose vendas a los numerosos casos de corrupción”, sostiene el partido.
La formación asegura además que esta privatización “no estuvo exenta del aumento de los impuestos que se cobraron a las pequeñas y medianas empresas, oponiéndose al beneficio que tenían las grandes”, además de la subida de los costes para el público general con el aumento del precio de las entradas a los principales actos Carnavaleros.
Los últimos episodios, apunta, “pasan por vallar y vigilar con seguridad privada un nuevo recinto para un aforo limitado en Las Palmas de Gran Canaria”. En este punto, el partido cree que la concesión a la empresa Sondeagua de la organización de la única zona de chiringuitos “es un paso más en el proceso de privatización y de desmantelamiento de la red popular del Carnaval”, además de señalar como objetivos de esta concesión “el limitar el botellón y evitar el acceso a los indeseables”. “Esto es una práctica que nos recuerda a las viejas Fiestas de Invierno de la dictadura, en las cuales los ricos asistían a unos bailes de acceso restringido”, añade.
IUC recuerda que precisamente el nuevo Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria nace en La Isleta, en un barrio popular, cosmopolita y de encuentro y que si algunas de estas medidas se hubiesen aplicado en 1976 “hoy no se contaría con el Carnaval”.
“La diáspora Carnavalera no se debe fundamentalmente a la mayor inseguridad sino al menor carácter participativo y del pueblo. Si el Carnaval deja de ser nuestro, si es de una o varias empresas privadas, haremos otro”, sostiene.
