La Marcha por la Dignidad se cierra con peticiones de huelga general
“Si esto no se apaña, caña, si esto no se arregla, huelga”. Este fue uno de los pareados más gritados por los cerca de 1.500 manifestantes que este sábado participaron en el fin de etapa de la Marcha de la Dignidad que ha recorrido la isla de Tenerife de norte a sur desde el pasado 26 de junio.
La Marcha se cerró en la emblemática Plaza de la Candelaria, justo donde se levantó la acampada del 15 M, con la petición de una huelga general, que se pretende que traspase fronteras y que sea internacional. “Estamos a la espera de la asamblea el próximo lunes en Madrid, en la que se perfilarán los próximos pasos a dar, pero está claro que vamos a la huelga y no solo en España”, afirmó uno de los integrantes del movimiento.
“No sabemos cuáles serán los próximos pasos concretos, pero por cada pueblo que hemos pasado ha quedado constituida una asamblea, al menos 12, y eso es lo importante, que el Movimiento no decaiga y lograr una democracia diferente a la que tenemos”, dijo otro de los participantes a este periódico.
“La huelga en contra del sistema la queremos muchas personas, muchísimas, así que va a ser inevitable, pero no se trata de que sea una huelga española, el sistema es mundial, y tenemos el respaldo de millones de indignados en todas partes, hasta en Hispanoamérica”, añadió otra manifestante.
Como en otras convocatorias del 15 M, la amalgama de personas en la manifestación contradice que se trate de una protesta solamente liderada por y para jóvenes. “Esto es más que una petición de trabajo”, opinaba Lola, treinta y tres años, dependienta. “Yo lo tengo, trabajo, pero esto es una reivindicación de otros muchos derechos conculcados, anulados por una democracia que entre todos hemos convertido en una caricatura”.
La Marcha por la dignidad culminó sin incidentes. Si acaso una pareja de novios y todos sus invitados fueron los más perjudicados, al no poder salir de la Iglesia de San Francisco acabada la ceremonia porque los manifestantes hicieron una sentada justo frente a ese lugar, en ese momento.
