Niños de La Guancha (Tenerife) aprenden a transmitir una alerta y a cómo comportarse ante situaciones de emergencia
SANTA CRUZ DE TENERIFE, 21 (EUROPA PRESS)
Personal del Servicio de Urgencias Canario (SUC) y del Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 1-1-2, dependientes de la Consejerías de Sanidad y de Economía, Hacienda y Seguridad del Gobierno de Canarias, respectivamente, visitaron esta semana a un grupo de niños que participan en un taller de verano organizado por el Ayuntamiento de La Guancha, en Tenerife, con el objetivo de enseñarles a transmitir una alerta al 1-1-2 y saber cómo comportarse ante una situación de emergencia sanitaria mientras llegan los recursos.
El taller, organizado por las Concejalías de Cultura y de Educación, se desarrolla en la ludoteca municipal La Piola y en las instalaciones deportivas del Colegio Público Plus Ultra y cuenta con la participación de 40 niños de edades comprendidas entre 4 y 13 años. Las actividades lúdicas y deportivas incluyen, también, otras actividades en las que colaboran otras instituciones como la Policía Local, el Cabildo de Tenerife y Cruz Roja.
Un técnico del SUC y un técnico de formación de ISCAN, empresa adjudicataria del transporte urgente en el norte de Tenerife, se desplazaron hasta La Guancha en una ambulancia de soporte vital básico y explicaron a este grupo de niños cuál es el procedimiento que se sigue cuando una persona solicita atención sanitaria de urgencia o emergencia. Además, mostraron cuál es el equipamiento con el que cuenta y para qué sirve. A los pequeños les llamó la atención ver el material sanitario que se utiliza para atender a los accidentados y algunos voluntarios conocieron la sensación de tener colocado un collarín, una férula de vacío con la que se inmoviliza el miembro lesionado hasta la llegada a un centro sanitario. También se les enseñó lo que es un desfibrilador y su uso en las paradas cardiorrespiratorias.
Por su parte, un coordinador multisectorial y un técnico de coordinación operativa del Cecoes 1-1-2 acudieron a esta cita en uno de los vehículos de coordinación del Servicio para explicar a los pequeños qué es el 1-1-2 Canarias y cuál es el proceso que sigue una llamada solicitando ayuda, desde que la atiende el operador de demanda hasta que se activan los recursos necesarios para dar respuesta a dicha petición.
El coordinador multisectorial del Cecoes inculcó a los pequeños que cuando necesiten ayuda y llamen al teléfono único de emergencias 1-1-2 es fundamental que sitúen correctamente el incidente, es decir, que comuniquen desde dónde se llama, para lo que es imprescindible que se aprendan la dirección donde viven. En segundo lugar, deben explicar al operador que atiende su llamada qué es lo que ha sucedido: si un familiar está enfermo y no reacciona, o si a ellos mismos les sucede algo, se han caído, no pueden respirar bien, están mareados y no están en presencia de un adulto.
Al finalizar la visita, los pequeños se mostraron especialmente interesados por conocer el interior de los dos vehículos y sobre todo por escuchar y contemplar la señalización acústica y luminosa que utilizan cuando se dirigen a un incidente.