Rodríguez continuará con la política de su ''maestro'' Bañolas

El nuevo alcalde de Guía, Pedro Rodríguez, ha anunciado este lunes que su actución al frente del Consistorio será “continuísta con la política de Bañolas”. “Cambia el presidente de la corporación pero el grupo de gobierno es el mismo, con la incorporación de una nueva concejala. Vamos a seguir en la misma línea de trabajo”, anunció Rodríguez tras recibir el bastón de mando de Santa María de Guía en sustitución de Fernando Bañolas, quien adelanta su salida en siete meses tras ser nombrado consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias por el presidente Paulino Rivero

Rodríguez no dudó en destacar el talante de Bañolas: “Me ha enseñado a escuchar a los vecinos, a atenderles con mucho cariño, y saber que siempre hay que estar a su servicio. A nadie se le esconde que en los últimos años me ha delegado las áreas más importantes del Ayuntamiento con el fin de estar preparado ante su marcha al final de esta legislatura”.

Rodríguez es además el elegido para encabezar la próxima lista electoral de Coalición Canaria en el municipio, un feudo históricamente fiel a la formación nacionalista, mientras que Bañolas encabezará la plancha al Cabildo de Gran Canaria.

La expectación era inusual en la sede del Ayuntamiento en el acto de investidura, con un aforo hasta la bandera y más medios informativos de lo habitual. Muchos fueron los que quería felicitar y desear suerte al alcalde que había regido los destinos del municipio norteño durante los once últimos años.

No sólo para Bañolas llegaron las felicitaciones y los buenos deseos, también Pedro Rodríguez, hasta ahora su mano derecha en el consistorio guiense, vivió también momentos de sensaciones dispares. Por un lado, la alegría y el honor de desempeñar el cargo a sus 37 años de edad; y por otro, “la marcha de no sólo un amigo y un compañero, sino de un maestro”, afirmó el nuevo alcalde.

El alcalde saliente de Santa María de Guía no ocultaba su emoción en una fecha marcada por los sentimientos encontrados: pena por ceder el bastón de mando, aunque orgulloso de la nueva etapa que afronta como consejero de Sanidad.

“Es la despedida después de once años de trabajo en equipo, de esfuerzo, de lucha y también de escuchar mucho, de oír lo que realmente querían los vecinos. Me marcho muy orgulloso, porque he tenido un respaldo importante de la ciudadanía, lo que agradezco”, manifestó.