Educación apuesta por la presencialidad en el diseño del nuevo curso canario por el “riesgo de absentismo” con las clases digitales

IES Pérez Galdós, en Gran Canaria, preparado con la señalización correspondiente y las medidas de higiene para el alumnado de refuerzo.

Jennifer Jiménez

Las Palmas de Gran Canaria —

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Septiembre y de forma presencial. Es el objetivo en el que trabaja la Consejería de Educación de cara al diseño del próximo curso escolar, aunque no se descartan otros escenarios según la evolución de la pandemia. Así lo ha asegurado este miércoles en el Parlamento de Canarias el nuevo consejero José Antonio Valbuena, que ha aclarado que la responsabilidad y las garantías sanitarias en ningún caso será de los equipos directivos de los centros, sino de los departamentos de la propia Consejería. Una aclaración que realizó después de que se generara esta incertidumbre entre la comunidad educativa el fin de semana anterior a que la exconsejera María José Guerra dimitiera. Y es que, con las clases digitales se corre mayor “riesgo de absentismo” para el alumnado y el objetivo es no dejar a nadie atrás, recalcó.

Se trata de un objetivo que el consejero ha destacado después de conocerse que el Ministerio de Educación ha relajado las condiciones de la vuelta al colegio en septiembre. La distancia de 1,5 metros y un máximo de 20 alumnos por aula son las nuevas propuestas, según afirmó la ministra Isabel Celáa en la Cadena Ser en la mañana de este miércoles. Unas condiciones que además se enmarcan en un documento que será tratado mañana en la Conferencia Sectorial entre el Ministerio y las Comunidades Autónomas, donde también se propone que en Infantil y hasta 4º de Primaria las clases sean “idealmente” de 15 alumnos.

El consejero, que ha asumido el cargo temporalmente, ha asegurado que se encuentra manteniendo numerosas reuniones con toda la comunidad educativa para diseñar ese próximo curso, que tiene como prioridad proteger al alumnado “más vulnerable” y garantizar el derecho a una educación de calidad. Y es que, la brecha digital consecuente de la socioeconómica que afecta en Canarias es uno de los puntos más comentados en la sesión celebrada este miércoles en el Parlamento. “Hay chicos y chicas que han pasado en estos meses por auténticos dramas”, destacó el consejero, que cree que por ello será fundamental reforzar la labor de las tutorías y diseñar el aprendizaje desde el punto de vista emotivo y motivacional.

Valbuena aclaró que la prioridad es que las clases sean presenciales aunque se barajan otros escenarios que siempre dependerán de las condiciones sanitarias. Por ello, se trabajan en unas instrucciones centradas en la seguridad de las personas y que potencien la adecuación de espacios y horarios, la gestión del tiempo “será compleja” y exigirá de cambios de hábito, así como de la digitalización de centros y adecuación curricular. Según destacó, el primer trimestre es el más importante en el curso académico y por ello hay que centrar esfuerzos en ello.

Muchas cuestiones planteadas por la oposición, como si se deben realizar test masivos, dependerán de las autoridades sanitarias y de la Conferencia Sectorial que mantendrá el Ministerio de Educación con las diferentes comunidades autónomas. Valbuena, no obstante, aclaró que habrá incluso protocolos para los comedores, que pasarán por reforzar al personal de vigilancia y atención en estos espacios. Así mismo, habrá que incrementar posiblemente el transporte y la limpieza, para lo que será importante el papel de los ayuntamientos.

La oposición hizo críticas este miércoles especialmente por la “falta de protocolos” para las escuelas de cero a tres años. De las 13 que dependen del Gobierno de Canarias, 6 ya han empezado a abrir con su protocolo y las privadas también lo han ido haciendo desde la semana pasada pero con sus propios protocolos. Por otro lado, se hizo hincapié en las medidas de cara al próximo curso, especialmente en si el alumnado tendrá que llevar mascarillas o si se les tomará la temperatura, cuestionó la diputada de Ciudadanos, Vidina Espino. Beatriz Calzada, de Coalición Canaria, insistió en qué posibilidades tiene la TV Canaria para convertirse en una televisión con herramientas educativas y al igual que la diputada Lorena Hernández, del PP, reclamaron que se aumente el número de orientadores educativos en este curso, ya que es una labor que se ha hecho más necesaria aún en esta crisis mientras que Canarias no cumple la ratio.

Hasta 240 pautas para el nuevo curso

Valbuena explicó que no puede concretar que día de septiembre empezará el próximo curso, como le insistió la oposición y sí aclaró que la semana que viene se creará una comisión general educativa para definir las más de 240 pautas que regirán el inicio de curso. Estas se dividirán a su vez en subcomisiones en base a los distintos niveles (Infantil, Secundaria...) compuestas por diferentes personalidades de la comunidad educativa, desde sindicatos, miembros de las escuelas públicas, privadas, concertadas, FECAI, FECAM...

La seguridad de las personas, la adecuación de espacios y horarios, la gestión de tiempos, la digitalización, la adecuación curricular, la organización de los centros y los servicios complementarios son algunos de los aspectos a tener en cuenta en esta planificación. Las subcomisiones también trabajarán en planes de digitalización, así como en medidas para detectar los niveles de aprendizaje con el que afronta el nuevo curso los estudiantes, en adaptaciones curriculares y en programas de recuperación de materias pendientes.

Los diputados de partidos que sostienen al Gobierno como Podemos o Nueva Canarias han hecho hincapié en la necesidad de apoyarse en los Servicios Sociales municipales para dar respuesta a la brecha socioeconómica. Carmen Hernández ha recordado que la labor educativa debe ir más allá de aspectos como la conciliación, que ha centrado parte del debate en las últimas semanas, y que para este fin lo que deben existir son medidas desde las propias empresas y la administración pública.

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