''Lo que ha pasado es que nos han estafado''
“Lo que ha pasado es que nos han estafado”. Así de tajante se muestra José Manuel Senrra, un gallego afincado en Gran Canaria desde hace siete años, que invirtió 40.000 euros en acciones preferentes en la sucursal de Franchy Roca de Novacaixagalicia, actual EVO. Lo que en principio fue “vendido como un buen producto y garantizado”, acabó significando la pertenencia al más de un millón de personas que se han visto afectados por un producto tóxico que ha repercutido más de 30.000 millones de euros a algunos bancos y cajas españoles.
“En ningún momento me dijeron que eran perpetuas”, asegura, “nos lo vendieron como un depósito que se podía retirar en 48 horas”. Las preferentes son un producto destinado a clientes especializados y bien informados, con cualidades para calibrar los riesgos que estos activos tóxicos albergan. Sin embargo, fueron “colocados” a clientes habituales sin información al respecto. “Yo no se de finanzas; a mí me engañaron”, añade.
“Novacaixagalicia nunca me había mentido, por lo que confiaba plenamente en la entidad”, relata José Manuel Senrra, quien asegura estar con tratamiento de antidepresivos a causa de una presión por la situación que asegura ser inaguantable. “¿Quién iba a pensar que un banco me iba a estafar de esta manera?”.
Varias entidades han ofrecido a los clientes afectados algunas alternativas beneficiosas, como el canjear las preferentes por imposiciones a plazo fijo, pero el caso de Novacaixagalicia presenta mayores dificultades, ya que, al estar intervenida, las decisiones al respecto han de pasar por Bruselas.
Hace varios días, la Fiscalía gallega comunicó que va a reclamar 1.108 millones de euros a la entidad, noticia que ha sido recibida con optimismo por los afectados. “Yo voy a recuperar todo el dinero que tanto sudor me ha costado ganar”, relata un confiado José Manuel, aunque lanza al aire una pregunta con difícil respuesta: “Aunque ofrezcan soluciones, ¿quién va a reparar el daño psicológico?”.
Parejas rotas, depresiones severas, crisis continuas de ansiedad y varios más son los perjuicios que estos productos “ideados para sanear los bancos a costa del perjuicio de sus clientes” han ocasionado. Consecuencias de ver como los ahorros de toda una vida están en peligro en estos tiempos en donde la solvencia económica para llegar a fin de mes suele estar bajo el telón de la incertidumbre.