Sanidad levanta la restricción de consumo de agua de abasto en Las Palmas de Gran Canaria

Las autoridades sanitarias decretaron este lunes el levantamiento de la restricción al agua de consumo humano por concentración de boro por encima de los niveles permitidos por la UE en Las Palmas de Gran Canaria, según anunció este martes la empresa Emalsa.

La compañía responsable de la gestión del Ciclo Integral del Agua en Las Palmas de Gran Canaria informó en un comunicado de que el 19 de junio, y tras “un exigente programa de autocontrol que asegura la consolidación de los buenos resultados analíticos de los dos últimos meses”, solicitó a la Dirección del Área de Salud de Gran Canaria que formalizara esta suspensión de las restricciones, acordadas en abril, una petición a la que Sanidad ha dado luz verde.

Emalsa destacó que tras meses de intenso trabajo, los trabajadores de las plantas desaladoras han adelantado y culminado con éxito el plan de trabajo para la mejora de los niveles de concentración de boro, inicialmente planificado para el periodo 2009-2010, en el que se han invertido 1,7 millones de euros.

Con este dinero se han adecuación instalaciones y se han sustitución más de 2.600 membranas por nuevas de última generación “eco-eficentes y de alto rechazo al boro”.

La primera medida adoptada en abril, de forma coyuntural, atendiendo a la restricción sanitaria impuesta y por la especial disponibilidad de reservas por las extraordinarias lluvias del último invierno, fue aumentar la compra de agua de pozo en un 135%, a lo que Emalsa ha destinado hasta el mes de junio un millón de euros, explicó la compañía.

Esta alternativa a la producción de agua desalada ha permitido diluir el ligero exceso de concentración sobre los niveles permitidos desde hace ya dos meses.

Esta política ha supuesto importantes cambios en la gestión de los 1.251 kilómetros de red para asegurar que el más de medio centenar de depósitos de la ciudad tuviera agua suficiente y de la calidad exigida.

El equipo de distribución ha seguido 24 horas al día el nivel de los depósitos y el funcionamiento de estaciones de bombeo, resolviendo la compleja nueva operatoria sin incidencias en el servicio.

La actividad en el laboratorio de Emalsa durante estos meses ha sido igualmente intensa. La restricción sanitaria impuesta y los trabajos en la desaladora han requerido un importante aumento de los análisis realizados.

Al seguimiento de los niveles de boro producidos por los 10 bastidores de ósmosis en cada una de sus etapas, se ha sumado el exigente programa de autocontrol de las redes y depósitos de la ciudad diseñado por Emalsa.

El levantamiento de la restricción de uso del agua de abasto se ha solicitado acompañado de un exigente programa de seguimiento analítico que dé garantías del riguroso cumplimiento de la actual normativa europea, que se revisará elevando el límite actual para el boro al doble de los niveles que anunció Emalsa el pasado mes de abril.

Emalsa aseguró que en estos meses de actividad frenética ha respondido puntualmente a toda la información solicitada tanto desde el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria como desde Sanidad, a administraciones a las que ha manteniendo al tanto del avance de los trabajos y de los resultados analíticos de las muestras que se han ido tomando en los depósitos y redes de distribución de la ciudad a lo largo de estos meses.

Etiquetas
stats