El PP califica de “grave irresponsabilidad” que se celebrase el Carnaval de Día en Tenerife
- Los actos se celebraron con uno de los peores aires del mundo, como estableció World Air Quality Index, que mide la calidad del aire en numerosas ciudad, indica el PP en un comunicado
El Partido Popular (PP) de Santa Cruz de Tenerife ha calificado este lunes de “grave irresponsabilidad” que el domingo se celebrase el Carnaval de Día en la capital tinerfeña a pesar de que el Gobierno de Canarias había declarado la alerta por la presencia de calima.
Los actos se celebraron con uno de los peores aires del mundo, como estableció World Air Quality Index, que mide la calidad del aire en numerosas ciudad, indica el PP en un comunicado, en el que añade que el Hospital Universitario de Canarias comunicó a mediados de mes que debido a la calima se incrementan sustancialmente las asistencias sanitarias por problemas respiratorios.
El PP señala asimismo que a lo anterior se suma que parte de los efectivos de seguridad y emergencias de la ciudad fueron enviados a contribuir a la extinción de los fuegos declarados en los municipios del norte de la isla, “con lo que estos servicios estaban mermados para la celebración de un evento de estas características”.
Para el portavoz del grupo Popular en el Ayuntamiento de Santa Cruz, Guillermo Díaz Guerra, “este equipo de gobierno ha demostrado incapacidad para gestionar una crisis”, y en este sentido dice que “este carnaval ha puesto de manifiesto que para gobernar hace falta algo más que simpatía y sonrisas”.
Díaz Guerra apunta que “desde el inicio de la organización de nuestra fiesta por excelencia, el gobierno municipal demostró una lentitud inusual para tramitar los pliegos de los escenarios o de los servicios de asistencia sanitaria, para más tarde, desde el ocultismo, negociar los patrocinios privados o contratar orquestas”.
Por otro lado, “fueron incapaces de rectificar, manteniendo publicidad prohibida para menores, y gastaron un disparate en una cuestionada gala, para finalmente, de una manera irresponsable, mantener una fiesta que no solo demuestra la falta de solidaridad con el resto de la isla, sino que además puso en riesgo la salud de muchos chicharreros, muchos de ellos menores”.
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