Antonio Bethencourt Massieu, insigne historiador y miembro del jurado, estaba que no salía de su asombro. Y con razón, porque no es normal que a un premio de este tipo concurran un total de 28 trabajos, y encima con una altísima calidad todos ellos, según ha dicho. Dotado con 15.000 euros, el premio de investigación Chil y Naranjo - Fundación Caja Rural de Canarias 2003recayó en un trabajo cuyo título es, cuanto menos, sugerente, Crónica, historias, relaciones y otros relatos: las fuentes narrativas del proceso de interacción cultural entre aborígenes canarios y europeos (siglos XIV a XVII). Por no decir nada del seudónimo empleado por su autor, Mandinga. El jurado estuvo compuesto por Óscar Bergasa Perdomo (profesor titular de Economía Aplicada de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), Antonio de Bethencourt Massieu (catedrático emérito de Historia Moderna de la UNED), Francisco Fajardo Spínola (profesor titular de Historia Moderna de la Universidad de La Laguna), Maximiano Trapero (catedrático de Filología Española de la ULPGC), actuando de presidente del jurado Lucas de Saá Padilla (presidente de la Fundación Caja Rural de Canarias) y de secretario Juan Ignacio Romón Viéitez (directivo de Caja Rural de Canarias).